La banda asturiana describe su música como "bandas sonoras para películas que aún no existen", y este primer disco reúne, en efecto, una serie de paisajes sonoros que apuestan por el ambient de inspiración post-rock y lo abstracto sin renunciar, en algunos momentos, a dibujar melodías orgánicas y definidas. Sale con el sello discográfico Framily, una cooperativa de artistas basada en Xixón que se estrena con Galgo y con Cicada. El álbum ha sido masterizado por Carlos Koschitzky y mezclado por Oscar Mulero, que ya trabajó juntoa a Javier Bejarano en el proyecto audiovisual "Monochrome".
El grupo está trabajando en una gira de presentación por España con una puesta en escena minimalista y de desarrollo lento, en la que Javier (Pablo Und Destruktion, Fee Reega) acompañará al piano de Verónica (compositora e intérprete de la compañía de teatro de sombras Luz, Micro y Punto) con loops y capas construidas con la guitarra.
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