Viva el Rollo! Una crónica de Rock & Rollo en la España de 1975
Libros / Edi Clavo

Viva el Rollo! Una crónica de Rock & Rollo en la España de 1975

9 / 10
Carlos Pérez de Ziriza — 25-11-2022
Empresa — Sílex Ediciones

Quien fuera batería de Gabinete Caligari tenía entre dieciséis y diecisiete años en 1975, cuando murió Franco. Una edad iniciática, para cualquiera. Seguramente por eso este libro sea no solo una cuenta saldada con su propio pasado, aunque aquí él no sea más que un testigo de excepción, y nunca un protagonista, sino también una fabulosa y milimétrica evocación de un año bisagra como pocos en la cultura popular española: justo entre el tardojipismo (decir “tardo” y “España” era hablar de sinónimos entonces) y la nueva ola que dio paso a la Movida.

Asombra la memoria exhaustiva de Clavo, por mucho que ya diera muestras de ella en “Electricidad revisitada” (15) y “Camino Soria” (18). Su apabullante acopio de documentación sobre una época en la que precisamente las fuentes fiables no abundaban, y especialmente su brillante estilo literario, que hace propios algunos modismos de la época, ya sean extraídos del lenguaje de la calle como del periodismo de aquel tiempo, hasta traerlos al presente. El libro está maravillosamente escrito, y eso es innegable. El mérito es aún mayor si tenemos en cuenta que los setenta son una década que, en términos mercadotécnicos, vende muy poco en este país. Es un salto sin apenas red, un escorzo que apenas contaba con los dos precedentes de –cómo no– Jesús Ordovás: aquel lejano “De qué va el rrollo” (1977) y el más reciente “Fiebre de vivir. Apocalípticos y desintegrados en el rock español de los 70” (2017). Aunque a las generaciones más jóvenes les pueda sonar a chino, era este un país muy lejos de la normalización. En el que capas de la juventud que ni mucho menos eran mayoritarias ansiaban abandonarse (melena al viento y tintorro en mano) al rock and roll way of life mientras la ley de peligrosidad social y los grises amenazaban con el palo. Eran pura contracultura, cuando no vistos como chusma.

Edi Clavo rememora a fondo el panorama televisivo, radiofónico y periodístico de la época (cuántos periodistas luego célebres abandonaron la crónica musical por no se verse en la ruina, por cierto), la dicotomía entre las tribus de rockeros y sinfónicos, los iniciáticos festivales de Canet Rock y Burgos (el de la famosa “cochambre”), así como los discos, cómics y libros que marcaron un cúmulo de inquietudes con epicentro en Sevilla, Barcelona y Madrid, aunque con extensiones en todo el estado. Aquella época en que la basca, incluidos los más pasotas del barrio, lo único que quería era enrollarse al máximo, en terminología de la época (hasta los apuntes lexicográficos del origen de esta jerga son indispensables), evocada con un estilo mordaz, perspicaz y erudito, redondeando uno de los mejores libros musicales publicados en castellano este año.

 

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