Miedo y asco en las calles de Londres. Ésta es la nueva mierda que ha visto nacer el Reino Unido: si Dizzee Rascal lo puso en el tablero de juego, aún faltan exponentes fuertes de género y ya ha suscitado tanto revuelo que igual se quema antes de tiempo.
El grime, o tantos otros nombres que sirven igualmente para nombrarlo, viene a ser una mezcla de géneros donde la virulencia de un rap desgañitado, actitudes punk, dancehall, jungle, bases rotas, y cenizas de UK garage, se reúnen confirmando la teoría de que el todo es más que la suma de las partes, y dando así pista verde al género gamberro de los barrios londinenses. En esta partida juegan los Virus Syndicate: si Mark One brinda unas bases repletas de sampleos, oscuridad, hardcore y quebraduras de ritmos, sus secuaces en el plano verbal (Goldfinger, JSD y Nika D), escupen al micro con verborrea implacable y un aire de maldad y diversión imperturbables. Llegan a lo bruto, lo vomitan todo y dejan restos de esta mugre corriendo por los cables de los cascos. Mientras van goteando futuras referencias del género, los once cortes de este “The Work Related Illness” son ejemplo de calidad de esta movida enferma, prisma de géneros; la última palpitación de relativa novedad en el panorama del rollo más urbano.
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