Laura Cantrell es una chica ambiciosa que ha sabido luchar para conseguir sus objetivos. Ha estudiado la música americana del siglo pasado y su bagaje musical es enorme. “Humming By The Flowered Vine” es su tercer disco hasta la fecha y el más completo, lujoso y arrebatador.
Hasta la portada y la hermosa foto interior de Cantrell junto a su piano es de una elegancia sorprendente. Su música es asombrosa, más aún gracias a JD Foster, responsable de un sonido limpio, preciso y ensoñador. A completar un disco tan apetecible la ayudan una veintena de músicos (Calexico, Dave Schramm, de quien toma prestada “And Still”, Amy Helm o Fiona McBain). Aquí encontrarás folk, country, destellos pop e incluso bluegrass (en la tradicional “Poor Ellen Smith”). La mitad de los temas son piezas propias (brillantes “California Rose” y “Old Downtown”) y la otra mitad, versiones (de entre las que destaca la oscura “Letters” de Lucinda Williams). Soberbio.
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