We Are The Mainstream

Jaungoikoa Eta Lege Zaharra. O lo que es lo mismo: El Infierno. Una vez disuelto el LABI y entregadas las armas, Helltzales toman el testigo en eso de jodernos la vida, pero en este caso a base de trallazos punk-rock sin ningún tipo de restricciones.

Los años pasan, los acúfenos galopan a sus anchas, pero las ganas de ruido y energía no terminan de agotarse y han llevado a estos cinco músicos a crear un proyecto más que añadir a su dilatada trayectoria. Puede que la banda sea nueva, pero en ella militan veteranos de la escena curtidos en grupos como Take Warning, Cordura, Control de Plagas, Los Cosméticos o Elfo Negro, y “We are the Mainstream” es la carta de presentación con la cual aspiran a tocar y tocar allá donde la cultura subterránea les acoja. Al contrario de lo que clama su título, siguen fieles a la escena que les ha visto crecer: no quieren triunfar, ni tocar en macrofestivales, les importa una mierda el mainstream; solo quieren sudor, buena compañía y volumen.

Volumen a raudales es lo que encontramos en estos cinco cortes tan rabiosos como los pastores alemanes de su portada (obra de Mikel, bajista y miembro también de Striknina) y ya desde el primer “FCKTHMNSTRM” toman partido: “fuck the mainstream, we are the mainstream!”. También desde el principio queda claro que su mayor referente son (quizá en exceso) los añorados Kuraia, pero esto no es ningún ejercicio de nostalgia en respuesta a la crisis de los cuarenta, y a lo largo del EP podemos encontrar ramalazos de todo pelaje musical. Llama la atención sobre todo la vuelta de Anero a aquel registro de los tiempos de “La Ridícula Mecánica de la Vida Moderna” (In My Heart Empire, 2006) en una “Circular” de poso post-hardcore. “El tiempo es circular”. Latidos que sin duda provienen del hardcore, sólidos como la sección rítmica que apuntala Pelos y a la que “Inercia” lleva a subir el nivel de zapatilla, con Aitor y Barrio cruzando sus guitarras desoyendo aquel consejo de los Cazafantasmas. “No miraré atrás.” Coros puño en alto para pasar en “Drogarik Gabe” a un euskera que los acerca más aún a Fer Sapo y Cía, “egun guztiak berdinak dira”, pero también hemos escuchado a Disfear, L7, Muletrain o The Capaces para cuando “Alta Traición” cierra un disco que verá la luz a través de 11 sellos distintos.

De Noruega a Barcelona, pasando por todo el Cantábrico de este a oeste, detrás de ellos hay personas inquietas que hacen posible el circuito underground, ese que acoge la cultura secreta de nuestro tiempo. En sus propias palabras: “Esta gente es la que merece la pena y nos hace soñar con una escena ajena de pose y pasta, basada en el mimo y el apoyo mutuo. Esa de la que Helltzales quiere formar parte y de la que sus miembros llevan formando parte desde hace muchos años.” Estaremos atentas a los que vendrán.