¡Bienvenidos al show hablado de Henry Rollins! Un espectáculo ligero en el que podrán escuchar todo tipo de sarcasmos, sandeces y chascarrillos por boca de un maestro de ceremonias de armas tomar. El ex-líder de Black Flag, animado por sus colegas de gira, sus amigos y la propia discográfica, se metió hace unos años en esto del “one man show”; actúo por varios locales y salas de fiesta y le funcionó bien.
Ahora, a poco de publicar “Nice” junto a la Rollins Bans, y después de desencajar mandíbulas americanas con ironía salvaje y desparpajo a raudales, ha decidido inmortalizar grandes momentos de sus monólogos en este “A Rollins In The Wry”, recopilando historias grabadas en 1999 en el Luna Park de Los Angeles. Se agradece el sonido ambiente, las risillas y carcajadas del entregado público, los aplausos desmesurados y sobre todo, más que nada, la voz nítida y cercana de Rollins. Podríamos entrar en el entramado de sus discursos, sus inagotables ataques contra el mundillo del rock, las giras, los fans paranoicos (“Death To Poets”, “Journal”) así como también la política de su país (“Clintonese”) o las relaciones con las suegras (“Future Parents”), pero para eso está el álbum, para comprárselo y sentarse en el sofá, servirse algo muy frío y disfrutar de este “Krusty” Rollins casi en directo para nosotros solos. Onomatopeyas incluidas.
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