Pura honestidad

Honestidad, sinceridad, pureza y alma es lo que se aprecia en cualquier trabajo de Rufus T. Firefly, y el nuevo disco no es menos. El álbum, que se está pudiendo adquirir en los directos y en su tienda, pero no en plataformas, lleva por título "El largo mañana". Por su eclecticismo y frescura seguro que no deja indiferente a ninguno de sus escuchantes.

Uno de los conciertos de presentación del LP fue el pasado sábado 30 de octubre en la bilbaína Sala BBK. Los de Aranjuez sobresalieron por todos los costados por su planteamiento escénico. La incorporación de Juan Feo a la percusión, proveniente de Club del Río, y de Marta Brandariz, de los madrileños The Low Flying Panic Attack, ha llevado a Rufus T. Firefly a una nueva dimensión sonora. Aunque eso no fue lo único reseñable del evento, claro está, pues la banda liderada por Víctor Cabezuelo y Julia Martín-Maestro apostó por una de las mayores anomalías en el mundo de la música actual para artistas de su talla: tocar el disco íntegro en directo sin haber sido editado en plataformas ni a través de grandes distribuidoras.

La hazaña fue valiente y acertada porque Rufus T. Firefly brillaron en cada uno de los cortes que interpretaron. En la mayoría de ellos se pudo discernir la típica esencia del grupo, esta vez aderezada con toques soul de la onda de Marvin Gaye y Curtis Mayfield, tal y como Víctor comentó sobre las influencias que buscaron para trabajar en su nuevo disco. El espectáculo fue largo, de casi dos horas de duración, con un pequeño parón antes de los bises donde aprovecharon para tocar varios de sus anteriores éxitos como "Nebulosa jade", "Un breve e insignificante momento en la breve e insignificante historia de la humanidad" y "Río Wolf", varias de las cuales fueron readaptadas al nuevo formato y estilo.

La música de Rufus T. Firefly no responde a ese tipo de vanidades artísticas con las que ahora estamos tan acostumbrados a convivir. Su materialización es la representación de un amor, casi en forma de homenaje, hacia la música, hacia el cariño y hacia el trato humano de las más vivientes y sinceras del panorama nacional. Una vez que entras en Rufus, no podrás volver a salir. Este nuevo ejercicio de directo y el que promete ser un discazo hace buena gala de ello. El largo mañana ya ha caído encima de nosotros como una lluvia suave y será el lugar adonde podremos volver siempre que nos sintamos perdidos.