Entrevista con el director de fotografía Roger Deakins por su libro “Byways”
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Entrevista con el director de fotografía Roger Deakins por su libro “Byways”

J. Picatoste Verdejo — 06-01-2024
Fotografía — Jordi Picatoste

Roger Deakins (1949), uno de los directores de fotografía más importantes de la actualidad, y su estrecha colaboradora y esposa James Ellis, forman el Team Deakins, como se les conoce en redes, y pasaron unos días en Barcelona invitados por la escuela ECIB, a partir de la iniciativa de dos alumnos, Estefanía Ortiz y Joel Smit.

El operador británico aprovechó la estancia para inaugurar una exposición y presentar su libro de fotografías “Byways”. Con voz tranquila y aparente timidez, respondió, sentado junto James Ellis, esta entrevista express de diez minutos, tiempo a todas luces insuficiente para abordar una carrera tan resplandeciente.

Estás presentando un libro y tu última película, “Imperio de la luz”, de Sam Mendes, data del año pasado. ¿Significa eso que te estás retirando o es solo un descanso?
[Suelta una carcajada y ella exclama “¡hala!”]
(James Ellis) Solo un descanso.
(Roger Deakins) Solo un descanso. Veremos lo que sucede. No puedes trabajar si no te ofrecen algo que quieras hacer.
(Ellis) Y es algo difícil de saber con todo lo que está pasando en la industria. Ahora mismo no hay proyectos a causa de las huelgas.
(Deakins) No hemos recibido nada directamente. Hemos hablado con gente de alguna cosa, pero no hay nada concreto.

“Me encantaría volver a trabajar con los hermanos Coen si me lo pidieran”

“Byways” es un libro de fotografías en blanco y negro. ¿Qué representa el uso del blanco y negro para Roger Deakins?
(Deakins) Simplemente me gusta la sencillez. Siempre me ha gustado el blanco y negro. Tal vez cuando era pequeño y veía las fotografías de otra gente, me gustaba el blanco el negro y eso se ha quedado conmigo. Pensando en la simplicidad creo que el color en las fotografías puede ser una distracción. Hay fotógrafos que utilizan el color brillantemente como Harry Gruyaert, que es un experto en ello. Pero yo realmente no veo en color [risas].

Si no me equivoco, “El hombre que nunca estuvo allí” de los hermanos Coen, es su única película en blanco y negro...
(Deakins) Sí, que fue rodada en color y luego hecha en blanco y negro [risas].

¿Todavía crees que es tu mejor trabajo?
(Deakins) No sé si es mi mejor trabajo, pero creo que como obra de cine reflejando aquel guion, o lo que Joel y Ethan querían conseguir, es casi perfecta. Eso no es reflejo de mi trabajo, sino que la película tiene una atmósfera. Es una pieza muy inteligente de arte cinematográfico.

Hiciste doce películas con los hermanos Coen, el director de fotografía que más ha trabajado con ellos. Después de la separación profesional de los dos, no ha trabajado con ninguno. ¿Fue deliberado? ¿Ninguno te llamó para sus debuts en solitario?
(Deakins) Cuando iba a hacer “Skyfall”, les dije que me gustaría hacerla, por la manera, muy interesante, como Sam Mendes iba a abordarla. Joel y Ethan me dijeron que ellos no iban a hacer nada. Y empecé con “Skyfall”, pero a mitad, les llegó algo y Ethan me dijo que lo sentían, pero que sí iban hacer una película [risas. Se refiere a la producción de Netflix “La balada de Buster Scruggs”] y es cuando empezaron a trabajar con otra gente. En ese caso, Bruno. [Bruno Delbonnel sería después el director de fotografía del debut en solitario de Joel Coen, “La tragedia de Macbeth”.
(Ellis) Porque Roger no estaba disponible, estaba en medio de “Skyfall”.

¿Pero podríais volver a trabajar juntos?
(Deakins) Me encantaría, si me lo pidieran, pero... es algo que sucede en numerosas ocasiones. Con Michael Radford hice tres filmes [entre ellos “1984”, adaptación de la novela de George Orwell], pero a él le vino otro proyecto y yo ya había aceptado otra cosa. Entonces los caminos se separan y ¿qué puedes hacer?

Tienes dos Oscars [por “Blade Runner 2049” y “1917”], conseguidos en solo tres años, pero tuviste que esperar catorce nominaciones y más de dos décadas para recibir el primero. ¿Fue frustrante la espera?
(Deakins) No, no. Es la experiencia. En realidad, no importa demasiado. Lo que importa es el film, el trabajo, vivir lo que haces.
(Ellis) Es bueno que la película tenga reconocimiento.
(Deakins) De alguna manera, es triste. Ganas un Oscar y recibes pocas llamadas. No te quieren porque piensan que eres más caro. Chris Menges ganó dos seguidos [por “Los gritos del silencio” y “La misión”] y dice que el teléfono no sonó en meses y meses después de ganar dos Oscars. Probablemente es mejor no ganarlos [risas].

“De alguna manera ganar un Oscar es triste. No te llaman porque piensan que eres más caro”

Tu primera nominación fue por “Cadena perpetua”. ¿Qué viste en ese guion para aceptar un film de un director desconocido por aquel entonces como Frank Darabont?
(Deakins) Era un gran guion. Uno de los mejores que leímos y creo que todavía es uno de los mejores que he leído.
(James Ellis) Estaba muy bien estructurado. Lees ese guion y piensas que es imposible equivocarte.
(Deakins) Logísticamente, fue una película difícil de rodar en la prisión. Teníamos muchos interiores. Era una cárcel de verdad. El edificio principal era un decorado construido en un almacén, lo que dio problemas, pero rodando en la cárcel real teníamos exteriores e interiores. Había poca luz pasando a través de aquellas ventanas pequeñas. Si tienes luces fuera de la ventana iluminando un interior no puedes ir afuera a rodar un exterior porque queríamos tener andamios y demás. Técnicamente fue muy difícil.
(Ellis) Tampoco había un gran presupuesto.
(Deakins) Se eliminaron buenas escenas porque no podíamos permitírnoslas. No teníamos suficiente dinero o tiempo para rodarlas.
(Ellis) Pero fue un placer trabajar con Morgan Freeman y Tim Robbins.

Al inicio de tu carrera participaste en varios videoclips. ¿Qué aprendiste de esa experiencia?
(Deakins) Te daba mucha confianza. En un “rock video”, como los llamábamos, podías arriesgarte y siempre había algo que te podía cubrir si algo iba mal. Era divertido, rodabas rápido y era muy instintivo. Igual que cuando rodaba documentales. Te forma en cómo de rápido puedes reaccionar frente a algo y captarlo.

Uno de tus primeros fue “Sexual Healing” de Marvin Gaye ¿Qué recuerdas de la experiencia?
(Deakins) Con Marvin Gaye fue divertido. Yo nunca había pensado en trabajar en América. “Sexual Healing” se iba a rodar en Londres, pero alguien de su familia estaba enfermo y tuvo que quedarse en Los Angeles. Así que la primera vez que volé a América y Los Ángeles fue para trabajar con Marvin Gaye. Rodamos en un club de Sunset Strip. Fue una gran experiencia para mí. Bebí un poco aquel fin de semana [risas].

En tu adolescencia y juventud, ¿viviste las tensiones entre mods y rockers?
(Deakins) Crecí en Torquay y en el sur del condado de Devon [en la región del Sudoeste de Inglaterra]. Así que sí, las viví, pero no había tantas como en la región del Sudeste.

¿Y tú eras mod o rocker?
(Deakins) Bueno, yo acostumbraba a llevar winklepickers, unas botas negras muy puntiagudas. Las llevaba todo el tiempo. Incluso cuando iba a pescar [risas].
(Ellis) ¿Eso te convertía en un mod o un rocker?
(Deakins) No lo sé. Yo era más un Teddy Boy. Yo era una mezcla. Luego fui hippy, con el pelo muy largo. No sé lo que era. Afrontémoslo [risas].

 

 

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