Tras la demanda interpuesta por Dave Navarro, Eric Avery y Stephen Perkins contra Perry Farrell por agresión, negligencia y ruptura de contrato, el vocalista ha respondido con una contrademanda presentada este 16 de julio en la Corte Superior del Condado de Los Ángeles.
Farrell acusa a sus excompañeros de llevar a cabo una “campaña de acoso prolongada”, que incluyó sabotajes durante los conciertos al tocar a volumen excesivo para impedirle cantar. El detonante, según la demanda, fue el concierto del pasado 13 de septiembre en Boston, donde un enfrentamiento en escena acabó con Farrell empujando a Navarro. El incidente derivó en la cancelación de la gira de reunión de la banda, supuestamente sin el consentimiento de Farrell.
La demanda también incluye alegaciones de agresión backstage contra Farrell y su esposa, Etty Lau Farrell, quien figura como co-demandante junto a la empresa de gira Wilton’s Hilton Inc. Ambos reclaman daños físicos, emocionales y económicos.
Desde el otro bando, el abogado de Navarro, Avery y Perkins calificó la versión de Farrell como “historia revisionista” y citó publicaciones de la propia Etty Farrell reconociendo la agresión. El conflicto, lejos de apagarse, sigue generando titulares mientras los fans de la banda ven alejarse cualquier posible reconciliación.
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