“Un deseo, una pasión amorosa y erótica”

Amor, erotismo y pasión electrónica de norte a sur, de Andalucía al País Vasco. Parafraseando a Cortazar: “Andaban sin buscarse, pero sabiendo que andaban para encontrarse”. Verde Prato y Bronquio se encuentran y funden, a corazón abierto, en “Erromantizismoa”.

Estamos ante un Ep de tres canciones que desprenden pavesas de fuego enamorado, aroma a flores lisérgicas y latidos electrónicos que no te dejan tocar el suelo. Susurros desnudos y radicalismo a quemarropa a cuenta de una pareja artística que maneja como nadie vanguardia y tradición. Siga el baile de los amantes bajo la bola de espejos en llamas.

Partiendo de la temática y del título del EP, “Erromantizismoa” (24), parece que fuerais dos mitades predestinadas a encontrarse, ¿ese era el destino de la música de Verde Prato y Bronquio?
B: Había muchos indicadores de que esto acabaría ocurriendo. Circuitos parecidos, personas de unión en común y un algo difícil de explicar que dejaba claro que debíamos al menos intentar algo.
VP: Sí, ha sido un encuentro que nos ha servido a los dos y nos ha encantado trabajar juntos. En mi caso, ha sido muy interesante verle trabajar, cómo construye Santi las canciones y encuentra los sonidos para cada tema.

"La idea de hacer más música con Ana y tocar en directo es algo que me encantaría" (Bronquio) 

¿Qué os atrae más del estilo del otro?
VP: Me parece que controla todo lo que no domino, por un lado, toda la parte de sonido, de tecnología, de la que tengo tanto que aprender. Por otro lado, su estilo me parece radical, y eso me gusta mucho.
B: A mí me gusta Verde Prato en general, como un total, pero en concreto, su desnudez musical y su voz.

¿Cómo os conocéis y decidís aunar energías? Creo que la cosa comenzó en un Monkey Week, ¿no?
B: Estefanía de Plan B sembró la semilla en el Monkey Week de la pandemia, edición que se hizo “televisada” en YouTube. Tras eso fui a verla varias veces en directo y recuerdo en especial uno en Veranos de la Villa en Madrid. Me pareció de los bolos más bonitos que había visto en los últimos meses.
VP: A mí me gustaba mucho su música, y sí, gracias a Estefanía pudimos conocernos y hacer el match definitivo.

¿Cómo ha sido el modus operandi de ambos a la hora de crear estas tres piezas de “Erromantizismoa”?
B: Nos encerramos en la Tabakalera de Bilbao y ahí surgió prácticamente todo. Traíamos algo de casa muy esbozado, sólo para evitar el folio en blanco. Hicimos más de tres canciones, pero considerábamos que no estaban aún a la altura de las que hemos sacado. Igual más adelante se retoman, quién sabe.
VP: Eso es, primero en Tabakalera en Donostia y después en Madrid en Warner Chappell. Trabajamos juntos en la dirección que queríamos que tomara cada canción y, poco a poco, fuimos llegando a algo que nos gustaba a ambos.

Me encanta el tema inicial, “Maite, nauzu zeharkatu”, con ese punto de partida percusivo-camaleónico, que parece provenir de algún instrumento ancestral y, al siguiente parpadeo, muta a tormenta sudorosa de beats electrónicos y futuristas… Una cadencia y base explosiva, mientras la voz espectral y luminosa de Ana se abre paso entre las sombras, rezumando erotismo y pasión a cada fraseo… Dadme unas pinceladas sobre este inicio arrebatador, por favor.
B: Me gusta mucho la descripción que haces. El sonido es la rueda de un carro que saqué de no recuerdo dónde. Creo que lo primero que propuse en la residencia fue ese archivo de la rueda girando. Ahí a pelo. Luego Ana improvisó una melodía sobre el sonido y ya entre los dos decidimos las armonías, la estructura y el mood. Sabía que el brutalismo de algo mecánico imperfecto casaría muy bien con el registro de Ana. A mí me suena a norte de España.
VP: La letra es sobre un deseo, una pasión amorosa, erótica que habla de un “chico delicado”, la melodía diría que también es delicada, o dulce, y el contraste con la base tan fuerte, de esa radicalidad, me parece que nos funcionaba bien, llevaba la canción a algo que nos interesaba. A mí me gusta que ese mensaje de pronto se vuelve arrollador.

"Fue divertido que él cantara y además en euskera. Entre los dos decidimos un poco el tema y el tono de la letra. Fue un bonito experimento" (Verde Prato) 

“Laguntasuna bazen apurtezina” expande una hipnótica atmósfera de oscuridad resplandeciente que no te deja tocar el suelo… y, flotando y flotando, cuando vienes a darte cuenta, ya no hay vuelta atrás. Dueto romántico y envolvente en euskera que, tengo que confesar, me recuerda por momentos a esas melodías y atmósferas adictivas de Cigarettes After Sex… ¿Cómo nace esta canción?
VP: Esta idea la tenía trabajada Santi de antes. Fue divertido que él cantara y además en euskera. Entre los dos decidimos un poco el tema y el tono de la letra. Fue un bonito experimento.
B: Fue el principal esbozo que traje para evitar el vértigo de ese folio en blanco. Llevé unos acordes y una melodía sin letra que fue mutando a través de los dos hasta convertirse en un dueto. Imagino que el inicio de la idea de cantar los dos fue que grabé mi voz en idioma inventado en la demo para que Ana escuchara mi idea melódica. Por otra parte, el encaje de la melodía también es muy “pregunta-respuesta”, por lo que quedaba perfecto esa conversación.

El cierre perfecto lo pone la contención de “Agertokian neskatila”, con continuos destellos que amenazan con reventarnos el pecho a base de zarpazos de drum'n' bass, pero no, la tensión no se resuelve nunca y nos dejáis con gana de mucho más…
B: La amenaza engancha más que el ataque. Todos los intentos de resolver el break llevaban la canción a un lugar que no nos gustaba.
VP: Sí, la melodía de la voz estaba hecha previamente, más alguna línea de teclado también, y ya tenía ese deje de no culminar, de no cerrarse, con esos beats, manteniendo la tensión… nos parecía que de esa manera funcionaba muy bien.

Tras la experiencia de trabajar juntos y dar a luz este EP de tres canciones, ¿creéis que la colaboración se podría extender en un LP futuro? Y ¿os podremos disfrutar en algún directo compartido?
B: Como la idea de este encuentro no iba a ser más que eso, cada uno seguimos ahora mismo con nuestros conciertos por separado (yo sobre todo con Rocío Márquez), pero la idea de hacer más música con Ana y tocar en directo es algo que me encantaría.
VP: Me gustaría también, claro. Veremos como lo podemos gestionar, pero ¡seguro que en algún momento sucede!