(Puedes consultar las fechas de su gira al final de este artículo)
Pese a que Amy tan solo diera dos conciertos en España, Dale afirma guardar un gran recuerdo de su tiempo aquí. “Solía tener una novia en Barcelona, así que le tengo mucho aprecio a vuestro país”, nos cuenta entre risas, sin pasar por alto la vez que tocaron en el FIB de 2007. “Amy siempre lamentó no haber actuado más veces en España. Las veces que lo hicimos, sin ser muchas, fueron espectaculares, y ahora tenemos el enorme placer de resarcirnos celebrando el legado de nuestra amiga con ese público español que tanto la quiso”.
Los temas vienen ahora firmados por la voz en directo de la joven Bronte Shande, quien según nos cuenta Dale, tenía tan solo ocho años cuando descubrió la música de Amy. “La conocí de absoluta casualidad, en una sesión de micro abierto en Bristol. Por aquel entonces teníamos a otra cantante prevista para interpretar las canciones de Amy, pero a última hora falló y Bronte fue su reemplazo. Desde entonces supe que íbamos a hacer grandes cosas con ella en el futuro”. “Lo lleva dentro”, continúa. “Su voz, desde luego, fue el factor determinante para decantarnos por ella. Pero también hay algo en la sensibilidad con la que da vida a las canciones de Amy que la convierten en la vocalista ideal para este proyecto. Somos conscientes de la responsabilidad que esto supone para Bronte, pero ha demostrado llevar el legado de Amy con mucho respeto”.
"Todos formamos parte de este engranaje y todos tenemos responsabilidad sobre nuestras acciones, medios y público incluidos"
Por supuesto, no solo sobre Bronte radica el compromiso de honrar a Amy Winehouse en escena. Es una tarea compartida entre todos los músicos, que de forma clara se desligan del concepto “banda tributo” y definen su propuesta como una reinvención de dicha etiqueta. “La diferencia entre una banda tributo y nosotros es que nosotros sí conocimos a Amy", sentencia. "Eso hace que podamos hablarle al público de nuestras experiencias y mantener vivo su mito en el escenario, interpretando sus canciones tal y como lo hacíamos con ella. Con todos los respetos, pero las bandas tributo no pueden hacer eso. Nosotros siempre seremos una banda sin esa connotación”.
Si algo les definió en el pasado desde luego era su capacidad para improvisar y adaptarse a cada circunstancia, tan explosiva y cambiante como el estado de ánimo de Amy dictara. Ahora, según apunta Dale, los shows son más controlados, aunque siempre hay espacio para el volantazo. “Ninguno de nosotros puede improvisar como hacía Amy, pero desde luego conseguimos que cada show sea distinto y se sienta vivo. La discografía de Amy fue, desafortunadamente, breve, pero le sacamos mucho partido y logramos que la gente salga de nuestros conciertos con una sonrisa”.
El nombre de Amy continúa resonando con fuerza en el imaginario colectivo, prueba de ello fue "Back To Black”, el biopic de la cantante que se estrenó el pasado 2024 y que cuenta con el visto bueno del propio Dale. “Creo que hicieron un gran trabajo”, afirma. “Ade Omotayo, que fue su corista, y yo, estuvimos involucrados en la realización de las interpretaciones en vivo que se pueden ver en la película y la banda regrabó todas las canciones contando con la voz de Marisa Abela. Si quieres mi opinión, te diré que me parece un testimonio más completo de la vida de Amy de lo que en su momento fue el documental de 2015. En la película, por ejemplo, se recogen datos que en el documental se omitieron, como el enorme impacto que tuvo en su carrera la influencia de su abuela, y creo que es una buena manera de entender el mundo desde la perspectiva de Amy”.
Llegamos a un punto de la conversación en el que reflexionamos sobre si la industria ha evolucionado o no lo suficiente para que tragedias como la de Amy Winehouse no sucedan nunca más. Hoy día vemos a los artistas siendo más abiertos sobre su salud mental e incluso anunciando parones temporales en sus carreras cuando lo necesitan. Sin embargo, Dale no considera que las cosas hayan cambiado tanto. “No importa qué medidas tome la industria para cuidar de la gente, creo que siempre habrá personas que desgraciadamente no soporten la presión que implica este negocio”, concluye Dale. “De hecho, hasta te diría que todo se está volviendo cada vez más exigente, con las redes sociales y la inmediatez de las pantallas en nuestro día a día”, continúa. “Antes eran solo los tabloides, pero ahora cualquiera puede grabarse y emitir una opinión muy dura contra alguien o hacer ruido. Lo que quiero decir es que todos formamos parte de este engranaje y todos tenemos responsabilidad sobre nuestras acciones, medios y público incluidos. Es un asunto complejo y sabemos bien que esta no es una industria fácil, pero también puedo te puedo asegurar que no dejaría de trabajar en ella por nada”.
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