La historia de la música es como una película de ciencia ficción. “2005. El indie ha sido casi erradicado del planeta. Tan sólo un grupo de jóvenes insurgentes mantienen con su lucha la esperanza ante el totalitarismo de los sonidos comerciales”. De acuerdo que el argumento está sobado y tiene algo de tramposo, como por otra parte suele ocurrir con los guiones de Hollywood. Porque en realidad Why? nunca han sido propiamente un grupo que responda al estándar indie, al contrario, hunden sus raíces musicales en el hip hop, uno de los géneros por el que los jóvenes han apostado en perjuicio de los Pavement, Breeders y Pulp de aquellos días. Aunque, raros que son ellos, la banda de Doseone -el hombre conocido como “la voz nasal de Clouddead”- ha recorrido el camino inverso desde sus orígenes como típico producto Anticon de rap blanco con un pie en Ninja Tune y el otro en Domino Records, hasta la musicalidad pop, que los sitúa como herederos del espíritu iconoclasta de Stephen Malkmus y Cía.
| "Intentamos ser honestos, sinceros, con el objetivo de producir música que no es muy común" |
“Es lo mejor que hemos hecho hasta ahora. Tampoco es que nadie nos lo haya dicho pero oigo voces en mi cabeza que me dicen que es así”. Te lo digo yo, hombre, aunque no sé si te sirve de mucho. “Es difícil saber qué tipo de periodista me entendería mejor. Pop, hip hop… Aunque si alguien piensa que mi música merece la pena lo suficiente como para hablar sobre ella, da igual qué tipo el genero de música le guste… ¿Me entiendes?”. Perfectamente. Más allá del clásico “porque yo lo valgo” y “lo mío es lo mejor” que se estila tanto por estas tierras ya no tan quijotescas, Yoni Wolf y sus tres socios, su hermano Josrah, Matt Meldon y Doug McDrarmid, se acaban de sacar de la manga una excepcional colección de canciones que lo tienen todo, pero que tienen un pero: son demasiado complejas para ser considerado un pequeño clásico del pop. Si Animal Collective hacen folk, va a ser verdad que lo de Why? es la rima, canciones para orquestar un “South Park” melancólico desde la más sincera inocencia. “Intentamos ser honestos, sinceros, con el objetivo de producir música que no es muy común. Me gusta la perspectiva infantil, es decir que no copiamos la música de otra gente”. Pues si ese es el objetivo lo han conseguido, porque les sale raro de narices y, he leído por ahí, que menos luminoso de lo que sus bonitas melodías podrían hacernos imaginar. “¿Referencias al suicidio? Bueno, creo que todo el mundo habla sobre estas cosas o piensa en ellas. No digo que estar obsesionado con el suicidio sea lo más sano del mundo ni que yo le dé vueltas constantemente, y hace mucho tiempo que no pienso en eso pero es algo que… Mira, hablando de política, he visto una pegatina que decía ´salva el mundo, suicídate´. Y parecía una broma, pero la verdad es que hay algo de cierto en eso…”. Entiendo que estés deprimido si pasas el día dándonos explicaciones a los periodistas sobre el porqué de tu música, si “Elephant Eyelash” parte peras o no con Anticon, la razón de que Clouddead se fuera al garete, tu labor como songwriter… A veces hasta yo reflexiono en lo absurdo de las entrevistas musicales… “Bueno, la música es mi vida, tiene sentido que perdamos el tiempo hablando sobre eso…”, dice resignado. ¿Y el sexo? ¿La política? ¿La Playstation? “No juego a la Playstation. Me interesa la política. Bueno, no, no me interesa… estoy harto del sistema en el mundo, pero no sé cómo hablar sobre estas cosas. Estoy confundido también con las cosas del mundo. Creo que cuando pongo mis palabras en las revistas tengo una oportunidad de hacer algo, de cambiar algo, pero sería estúpido decir que Bush es un idiota porque todo el mundo lo sabe. En general, espero todas las preguntas de los periodistas y tengo las respuestas a esas preguntas. Me siento culpable cuando sólo hablo sobre música porque creo que debería hacerlo sobre cosas más importantes. Y sin embargo, como ocurre con mis canciones, entonces sólo sé hablar de mí mismo”. No es cierto, a continuación lo hizo sobre mormones, “El guardián en el centeno”, “The Young Ones”, Julie Doucet, “The Office” o “Kids In The Hall”. Y lo que es más importante, en “Elephant Eyelash” vuelve a darse el fenómeno del espejo: por mucho que mires sólo te vas a encontrar a ti mismo. Lenguaje universal.
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