Religión y sexo
Entrevistas / Dragonette

Religión y sexo

Redacción — 08-01-2008
Fotografía — Archivo

Controvertidos y contradictorios, los canadiense-británicos Dragonette son un matrimonio con banda, que hace pop de guitarras y máquinas con una cantante al frente que tan pronto se pone a lamer el micrófono como se excusa por existir. Y todo ello lo hacen con el sentido del humor más inteligente, el que se dirige a ellos mismos. Acaban de publicar “Galore” (Universal, 07).

De ahí que resalten aquella crítica que dijo de ellos que eran “un grupo que hace canciones sobre sexo y sobre Jesucristo”. (Martina Sorbara) “Esa es una definición de un único aspecto de lo que hacemos”. (Dan Kurtz) “Aunque es el reflejo del cabreo de algunos activistas cristianos americanos que se ofenden con el sentido del humor que le pones cuando cantas que hasta Jesús te ha abandonado cuando te sientes mal”.

"La vida es una parodia y queremos hacer lo contrario de tomarnos en serio"

(Sorbara) “Tenemos canciones de amor, sobre tirarte al novio de tus amigas y otras cosas, y sí, hay sexualidad, pero no son canciones sobre sexo”. Sorprende, por todo ello, ver el choque que hay entre la apariencia inocente de sus canciones, y la estética agresiva con la que se han rodeado. “Puede ser porque, a pesar de que contemos cosas que puedan ser escandalosas, no creemos que sean más que accidentes de la vida, y hay que reírse de ello”. O lo que es lo mismo, Dragonette nacen de un encuentro sexual y hacen canciones para un público anorgásmico. “Esa definición nos encanta, porque la vida es una parodia y queremos hacer lo contrario de tomarnos en serio”. Hay que tener en cuenta que Martina Sorbara es relativamente conocida como cantautora en la onda de Ani DiFranco, y que accedió a estar al frente de Dragonette cuando sintió que no tenía sentido rascarle la barriga a una guitarra. “Es una escena musical demasiado introspectiva de la que traté de huir con una sonrisa en los labios, pero no sería tan raro si en cinco años, en vez de esto, hago un disco de jazz”. Lo que no queda claro es si Martina es un auténtico personaje o si solamente lo es sobre un escenario, como Marilyn Manson. “Somos siempre actores. Lo importante es conseguir ser siempre Dragonette aunque la música sea más oscura o más espesa. La música tiene que estar por encima de los personajes siempre, incluso Dragonette”.

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