INYECCION DE VITAMINAS
EntrevistasThe Bolivians

INYECCION DE VITAMINAS

Javier Revuelta — 30-11-1999
Fotografía — Archivo

Formados en el 96, la actividad del trío BOLIVIANS comienza casi inmediatamente a dar frutos desde su arranque. El trabajo de estudio les facilita el camino a seguir con la incesante grabación de maquetas de trabajo donde dieron forma un repertorio primitivo. Esto hizo que descuidaran sus comparecencias en vivo, donde las canciones realmente se curten. Inmediatamente después de la salida de su primer disco, editado hace aproximadamente un año, el problema se solucionó. Ese primer disco tenía en realidad un buen montón de meses de vida. Una serie de problemas en cuanto a distribución se refiere por parte de su compañía (Rompeolas) impidió su salida al mercado en los plazos previstos. Esto no fue obstáculo para The Bolivians. Enzo Filippone, José Nortes y Carlos Oliver no dejaron de trabajar un momento en lo que mejor se les da: hacer canciones. «El primer disco se retrasó como un año, y durante ese tiempo compusimos mucho material. Aprovechando el tirón de crítica que tuvo el disco de presentación hemos sacado este. Ha sido una gozada incorporar los temas nuevos al repertorio». Carlos le toma la palabra a José. «Nos gustaría hacer lo que se hacía en los sesenta, sacar un disco por año. Tengo la necesidad de ir componiendo canciones nuevas, me canso de las antiguas pronto. Ahora se sacan los discos en función de las ventas y no de la creatividad del artista que es como debería ser. Ya podría la industria ser capaz de absorber a los que somos hiperactivos». Cuando se enteraron de que sus maquetas se estaban escuchando por los despachos de una multinacional tuvieron en el paladar una sensación agridulce. El padrino que tenían en ese momento quien inclinó la balanza para que su fichaje se definiera por una independiente. «Fue Paco Martín el que nos puso en contacto con la gente del sello y pienso que ha sido mejor así. En Rompeolas tenemos la libertad de trabajar como nosotros queremos, confían en nosotros plenamente hasta tal punto que nunca nos pidieron unas maquetas con las canciones de lo que iba a ser nuestro segundo disco «Midnightsmalltalk». En una multinacional las cosas nos hubieran ido de una forma más rígida». Dicho disco funcionó a modo de confirmación en la carrera de una banda que realmente trabaja el pop rock con precisión de tallador, desde el del primer Costello al de XTC o Police, incluso Tom Petty, Beatles, Graham Parker o la ELO. Todo esto produce una riqueza sonora que, resumiendo, da como efecto una serie de temas que van del instante nervioso, verdaderas inyecciones de vitaminas («Feel Like I’m Born Again», «All Right» o «To Live In Peace») al más relajado («Willow Town»), pasando por lo que se podría tomar por un medio tiempo («Jungle Song»). «Estoy (Oliver) orgulloso del tema que abre el disco («Feel Like I’m Born Again»), y pienso que nuestro trabajo va por ahí ahora mismo, temas más simples, más básicos, más directos». Ni más ni menos como a nosotros nos gustan.

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