Pongamos por caso que nos vamos de juerga a Tijuana. Lo tenemos a mano, porque somos de San Diego. Durante una noche loca de borrachera decidimos montar un grupo. Sólo uno de nosotros sabe tocar realmente, pero eso es lo de menos. Tenemos lo más importante: una colección de viejos vinilos compuesta casi exclusivamente por los discos que de verdad importan, a saber, los de The Velvet Underground, The Stooges, MC5, The Feelies, The Sonics, Television, Modern Lovers, Spacemen 3... Con esas referencias no necesitas saber cuántas cuerdas tiene una guitarra, colega. Con esos discos en casa nada puede salir mal.
Esa es, más a menos, la historia de The Soft Pack, antes llamados The Muslims. Bueno, lo de Tijuana es inventado, pero queda bien. Y sí, The Muslims era un nombre mucho mejor, pero en Estados Unidos no todo el mundo está dispuesto a tomarse las cosas con deportividad cuando se tocan ciertos temas. Tras peregrinar por varios sellos subterráneos (1928 Recordings, I Hate Rock’n’Roll, Sweet Tooth...) The Soft Pack publican ahora un disco homónimo auspiciado por Heavenly/Cooperative Music destinado a reafirmar nuestra por otro lado inamovible fe en el rock’n’roll y convertirse en uno de nuestros preferidos de este año. “Crecimos escuchando a Rocket From The Crypt”, cuenta Matt Lamkin, cantante del grupo que completan Matty McLoughlin (guitarra), David Lantzman (bajo) y Brian Hill (batería). De todos ellos, sólo este último había tocado antes en algún grupo, en concreto en los geniales The Plot To Blow Up The Eiffel Tower. El resto fueron aprendiendo sobre la marcha, aunque no tuvieron que esperar demasiado para convertir a su grupo en una de las bandas más interesantes de la escena de San Diego, que según Lamkin siempre ha esgrimido cierto orgullo frente al poder fagocitador de Los Angeles. “Los grupos de San Diego suelen quedarse en San Diego. Siempre ha habido allí una escena muy activa e incestuosa, en la que muchos músicos tocan en diferentes bandas y diferentes bandas comparten miembros. Nosotros nos hemos mudado a Los Angeles, pero nuestra decisión no ha tenido mucho que ver con la música. Unos cuantos amigos de toda la vida nos hemos mudado aquí. Esa es la razón. Además, vivir en Los Angeles no supone tanta diferencia, porque está realmente cerca de San Diego”“Desde el principio teníamos claro que queríamos tocar rock’n’roll simple. No había muchos grupos así en ese momento y era el tipo de música que nosotros escuchábamos. The Modern Lovers, Wire, Spacemen 3... Además, no sabíamos tocar nuestros instrumentos”. A pesar de esa falta de experiencia, o quizás precisamente gracias a ella, su primer disco, “The Muslims Ep”, se ha convertido en un álbum de culto, un convincente despliegue de genio crudo e incendiario repleto de himnos. Esa vocación sigue siendo algo evidente en su segundo largo, ahora con un sonido más elaborado aunque igualmente simple. “En realidad, era nuestra segunda vez en un estudio, pero influye el hecho de que tocamos mejor. Para nosotros es una continuación de lo que hicimos en el primer disco”
“The Soft Pack” es de esa clase de discos que te van a tener horas y horas preguntándote que los hace tan especiales: discos en los que no hay nada ni remotamente novedoso, nada innovador, signifique lo que signifique para ti eso, pero que parecen estar propulsados por el nervio instigador que sí alimentó a los artistas que han sido su fuente de inspiración. Eso es porque The Soft Pack conocen el pasado pero a la vez actúan como si el pasado no existiera y acabaran de inventar la rueda. Y eso mola. “Queremos hacer las cosas a nuestra manera”, cuenta un lacónico Matt Lamkin segundo antes de que nuestra conversación telefónica se corte sin remedio. Una lástima, porque habría estado bien hablar con ellos sobre los diez conciertos que ofrecieron en un día alrededor de la ciudad de Los Angeles para celebrar la edición de su nuevo trabajo. De hecho, sus fans podían solicitar a través de su web un concierto a domicilio. También podríamos haber hablado de sus repetidas visitas a España incluso antes de tener una distribución en condiciones aquí, pero tendrá que ser en la próxima ocasión.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.