Un recuerdo al futuro

Transcribir seis sesudas conferencias para plasmarlas (años más tarde) en las páginas de un libro de carácter generalista no es una maniobra exenta de riesgo: el no iniciado en la obra del conferenciante o en los intríngulis de la materia que aborda seguramente contemplará el texto con distanciamiento, como un denso corpus teórico. Algo de eso ocurre con este “Un recuerdo al futuro”, acopio de las seis charlas que ofreció Luciano Berio en 1993 y en 1994 en la Universidad de Harvard, aunque el esfuerzo intelectual –también es verdad que en este presente hiperconectado y saturado de estímulos estamos más acostumbrados que nunca a que cualquier contenido nos llegue bien masticadito– bien merece la pena, por la hondura de todo lo que expone.

Discípulo aventajado de Pierre Boulez, Anton Webern o Karl Heinz Stockhausen y experimentador de los primeros tiempos de la electrónica, el compositor italiano –fallecido en 2003– nos muestra aquí un credo que no deja ser un work in progress, un camino más interesante por lo que se encuentra en el camino que por divisar ningún fin: la compleja relación entre música y textualidad, entre notas y literatura, las diferentes texturas que se derivan del empleo de unos o de otros instrumentos, el fetichismo inherente a una cierta aprensión del pasado (que hoy en día se plasma en el resurgir del vinilo, pero ya aventuraba el mismo Adorno hace muchísimos años) y la relación entre música y su representación escénica son algunas de las cuestiones que desfilan a lo largo de estas ciento cuarenta y cuatro páginas, titánicamente traducidas por Rosa Rius y Pere Salvat. Un volumen que estimula el intelecto, destila una apabullante erudición y, sobre todo, brinda más interrogantes que certezas. Como la propia naturaleza, casi inaprensible, del hechizo que la música popular exhala en cualquiera de sus múltiples manifestaciones.