Hay que tener ganas de meterse a leer una obra sobre conspiraciones en el mundo farmacéutico con la sobredosis de información que está cayendo por el temita que todos y todas conocen. Y más aún si la cosa supera las seiscientas páginas. Pero les daré un consejo. Tómenselo como un thriller y lo van a disfrutar. Porque Patrick Radden Keefe ya demostró con “No digas nada”, aquella investigación sobre el asesinato por parte del IRA de una viuda con diez hijos, que es un maestro no solo investigando, sino presentando el resultado de esas investigaciones de manera amena y nada plomiza.
Ahora se empeña en que entendamos como se fraguó la fortuna de una de las familias ricachonas por excelencia de estados Unidos partiendo de la patente y fabricación de un medicamento tan común y necesario en nuestros tiempos como el célebre Valium, y como todo cayó cual castillo de naipes con la entrada en escena del Oxycontin y una campaña de publicidad engañosa que omitía el hecho de ser un potente opiáceo con altas dosis adictivas. Un medicamento que previo pago a un montón de médicos pasó de apenas dispensarse a convertirse en la principal receta para problemas leves mentales ¿Cómo lo consiguió la familia Sackler? ¿Cómo “convencieron” al gobierno y de paso a la OMS para que aprobaran su comercialización? ¿Qué hizo que cuando lo tenían todo hecho se fueran a pique para declararse en bancarrota en 2019 declarándose culpables de tres delitos graves contra la salud pública? ¿Cómo acabaron incluso comercializando su producto en el mercado negro? Preguntas todas ellas –y más– respondidas por uno de los ya grandes periodistas-investigadores que existen actualmente en el mundo literario. Estremecedor.
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