No tenía ni idea de la existencia de esta banda inglesa de sonido americano y desconocía del todo su anterior entrega, el mini-Lp ”Jesus Songs”. Sin embargo “Welcome Home, Loser” me ha dejado casi sin habla. Del todo lo han hecho canciones como “Yer Little Bedroom”, uno de los temas más bellos y cautivadores de lo que llevamos de año; y también el trepidante folk-rock de “Happy Days Are Here Again”, con el que abren el disco, o qué decir de esa pieza encantadora, emotiva y tierna que es “The Last Song”.
Ecos de los grandes bastiones del folk-rock americano; una lírica desencantada y turbia; unas acústicas que suenan a gloria bendita; unos juegos vocales de la escuela C.S.N.&Y. y unas dosis de country rock en la línea de un Gram Parsons reencarnado en la piel de Steven Adams. Él es el líder de un grupo que, con el tiempo, dará que hablar al mismo nivel que My Morning Jacket o Clem Snide, con los que guardan cierto paralelismo en las formas. Bandas que al estar al otro lado del charco son difíciles de apreciar en nuestro país. Pero The Broken Family Band no. Ellos están mucho más cerca y sólo por eso ya deberían ser una anotación subrayada en la agenda de los que gusten de la tradición ejecutada con personalidad intachable.
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