De las dieciocho canciones que integran este compacto, ocho llevan en su título la palabra “surf” o derivados. Cuatro más hacen alusión al sol, al verano y a la playa, mientras que el resto se reparten entre nombres de chicas, autopistas y revoluciones por minuto.
Está claro, pues, que estos suecos no se parecen a Joy Division. Y es que semejante demostración de hedonismo veraniego solamente podía salir del hombre que descubrió y lanzó en su sello Celidih a unos tales The Cardigans hace unos pocos años. El hombre, Ola Hermanson, y su banda, Sonic Surf City, representaron a mediados y finales de los ochenta la versión escandinava de los postulados power pop surferos establecidos por los Beach Boys y revisados por los Ramones. Todas estas canciones fueron editadas entre el 89 y el 92 en cuatro elepés y algún single que ahora recupera por primera vez en formato digital No Tomorrow. Canciones sencillas, melodías brillantes cargadas de luz y optimismo que no puedes evitar dejar entrar en tu triste corazón, arañándote una sonrisita. Porque estamos ante uno de esos discos que debería gustar a todo el mundo y que puede alegrarnos más de una tarde lluviosa. Especialmente indicado para fans de piezas como “Sheena Is A Punk Rocker”.
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