The Last Dinner Party triunfaron desde el momento en el que en 2023 apareció su sencillo "Nothing Matters" y para cuando su tremendo potencial se vio confirmado con su disco de debut, “Prelude To Ecstasy”, ya comenzaron a oírse voces que hablaban de un proyecto demasiado bueno para creérselo, de grupo plantado por la industria para vender discos.
Su imagen, sus vídeos, su gusto por la pompa, y, por qué no decirlo, el hecho de fueran mujeres, hicieron que muchos las pusieron en duda. Así que este “From The Pyre”, editado un año y medio después que el primero, parece su contundente respuesta a todos esos que pusieron en duda todo, a los que gritaban "grupo creado por la industria", a los que dudaban que un grupo pudiera estar tan absolutamente definido y con esas canciones en su primer disco, dudas que siempre llevaban la sospecha de misoginia. “Aquí está nuestro segundo trabajo”, con el que dejan claro que siguen llenas de ideas, armonías, melodías y canciones que tienen puentes que suenan como los estribillos de otras, todo ello mientras levantan el dedo corazón de su mano.
"Agnus Dei" es una perfecta carta de presentación, es increíble todo lo que cabe en sus cinco minutos de duración, va subiendo y bajando en intensidad, dejando claro su 'leitmotiv', bastante cercano a aquel "antes muerta que sencilla", que en este caso también podría ser "aquí viene el Apocalipsis y no puedo tener suficiente de él", con solo de guitarra incluido y coros a cuatro voces, claro que sí.
En "Count The Ways" vuelven los riffs sexys, como si fueran una especie de Arctic Monkeys de "AM", pero más melodramáticos, Abigail Morris sigue siendo una vocalista excelente y el estribillo que dejan vuelve a ser de quilates. "Second Best" comienza con un increíble arreglo coral que sigue respondiendo a la cantante hasta que entra la guitarra. En menos de un minuto la canción ha cambiado tres veces, dejando claro que otra de las cosas que han aprendido es a aprovechar cada segundo de una canción.
Pero es que cada tema de esta banda tiene más dinámicas dentro que los discos enteros de otras. Pongamos por caso ese "This Is The Killer Speaking" que explota en otro estribillo digno de ABBA, mientras en las estrofas suena a un amenazante tema de Morricone, o "Woman Is A Tree", que empieza con unas armonías que parecen sacadas de una película de terror y luego sigue con guiños al spaghetti western, para luego ir mezclando armonías angelicales con guitarras con eco y la sensación de que están conjurando algo. O ese final con "Inferno" con otra melodía irresistible y la sensación de que, en esta banda, la contribución de cada miembro no solo apoya al conjunto, sino que fortalece sus cimientos.
“From The Pyre” sigue sonando a ellas, esto es a un disco totalmente barroco, pero no es que suenen a Bach, ni a pop barroco, sino a música florida y recargada para bien, una mezcla entre los Queen menos recargados y los Sparks más melódicos, unas canciones que desbordan de ideas y dejan claro que The Last Dinner Party están aquí para quedarse.
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