Kai Slater lleva camino de ser una nueva versión de esos artistas tipo Ty Segall que sacan dos y tres discos por año, por lo menos si hacemos caso a un 2025 en el que no ha parado , en febrero llegaba la reedición del notable "Radio DDR" su disco del año pasado con otras 6 canciones nuevas, algo que le dio tiempo a girar por salas de todo el mundo, incluido España, para luego ponerse con su banda Lifeguard y publicar su disco largo de debut, "Ripped and Torn", pues, aun así, le ha dado tiempo a sacar un nuevo disco con los Sharp Pins, este "Balloon Balloon Balloon" con nada más y nada menos que 18 nuevas canciones (y tres pequeños interludios llamados "Balloon"), y, justo antes de que se publicara, anunciar un nuevo EP, "Ultra Violence", de Lifeguard para final de año.
Magníficas noticias para la gente que le sigue, sobre todo a este proyecto llamado Sharp Pins, que es como la versión 'lo fi' de los Lemon Twigs, aunque puede que sus referentes sean los mismos, su sonido está separado por uno o dos años, si los hermanos D'Addario buscan en los Beach Boys, Byrds, Beatles y Who de 1966 y 1967, los de Slater están más interesados en esos mismos grupos en 1964 y 1965, menos trabajo de estudio y más garaje, resultando en un sonido mucho más cercano a Guided By Voices que a sus referentes de los 60. Unos buscan producir como Brian Wilson y Todd Rundgren, los otros prefieren sonar como si estuvieran grabados desde el garaje de su casa en una cinta de cassette.
El disco comienza por todo lo alto con las excelentes "Popafangout" y "I Don't Have A Heart", la primera demostrando que ha perfeccionado el jangle de los primeros Byrds mientras que la segunda es pura Beatlemanía comprimida. Lo que las eleva por encima del puro pastiche musical, es la enorme calidad de Slater como compositor. Algo que se sigue comprobando en la increíble primera parte del disco, donde las píldoras power pop de dos minutos, o menos, siguen surgiendo como si Slater hubiera encontrado una veta inagotable de la que sacar pepitas de oro con las que hacer felices a todos los seguidores del género.
Así siguen surgiendo canciones tan vibrantes como "Queen Of Globes And Mirrors" o "(I Wanna) Be Your Girl", pero a partir de aquí comienzan a aparecer algunas canciones más de relleno, aunque sigue habiendo grandes momentos como "(In A While) You'll Be Mine" o "Take So Long".
Pero la veta se termina agotando y el disco se resiente, así que creo que, a pesar de su enorme nivel, esa sobreproducción de canciones y discos por parte de Slater se termina notando al final. Es más que probable que "Balloon Balloon Balloon" hubiera ganado reduciéndose a 12 o 13 canciones y a una duración de 30 o 35 minutos. Aun así, estamos ante un excelente artesano de canciones pop clásicas que sabe bañarlas con su elixir de refrescante y vigorizante energía juvenil.
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