Roy Stride se ha pasado media vida buscando chicas que, una vez encontradas, le han rasgado el corazón en mil pedazos.
Fue a partir de su colección de desengaños que Stride empezó a escribir canciones bajo el nombre de Scouting For Girls. El éxito de su primer Ep, “It’s Not about You”, predijo que su debut sería algo grande, al menos en el Reino Unido post brit-pop, que ha encumbrado y quemado con igual rapidez a Lily Allen, Kasabian, Amy Winehouse (y Kate Nash). “Scouting For Girls” es un disco correcto pero precipitado, que empieza con los cinco singles publicados hasta la fecha –con el prólogo estoico de “Keep On Walking”–: “She’s So Lovely” acierta porque Stride se deja llevar por el instinto, cosa que no pasa en “It’s Not About”, escrita para ganarse el corazón del público femenino; “The Airplane Song” empieza en las nubes para después explotar la vena más lastimera, “Heartbeat” combina optimismo con pasajes un poco ordinarios y “Elvis Ain’t Dead” es una píldora entrañable a medio camino entre Coldplay, Keane y Levy. A continuación, Stride calca la fórmula en las cuatro canciones restantes, e intuimos que de haber un sexto single será “James Bond”, elogio a la época Roger Moore, que algunos creemos fue el declive del espíritu de las (hoy en día olvidadas) novelas de Ian Fleming.
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