A Jeff Hanson le han comparado con acierto con dos monstruos de la escena independiente norteamericana: Connor Oberst y el desaparecido Elliott Smith. Con el primero le une su procacidad musical (Hanson ya andaba metido en bandas a los trece años) y su productor (AJ Mogis es el hermano de Mike Mogis, productor del primer disco de Hanson y de gran parte de la discografía de Bright Eyes); con el segundo le une su sello (Smith también grabó en Kill Rock Stars) y una más que reconocida deuda musical; y con lo dos le emparenta su condición de singer-songwriter.
Llegados a este punto, bueno sería decir que Hanson aún está por llegar a la altura de sus mentores, si bien ya muestra maneras en su segundo y homónimo disco. El de Milwaukee muestra su amor por los Big Star más acústicos, los de la fantásticas “Thirteen”, “Blue Moon” o “I´m In Love With A Girl”, y parece haber calcado su cuidado falsete (casi parece la voz de una mujer) tras haber escuchado compulsivamente todos los discos de las Softies. De eso se vale para fabricar unas composiciones que juegan con las guitarras acústicas, los arreglos de cuerda y un piano muy “Either/Or”, que acaban calando hondo. Habrá que marcarlo desde cerca los próximos años.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.