El japonés Towa Tei es excéntrico porque sí. Porque le gusta disfrutar en su papel de empedernido jovenzuelo, con aires warholianos, que abraza todos los sonidos lounge habidos y por haber.
Su sexto álbum en solitario llamado “Flash” –como el programa de animación por ordenador- es un cuerpo electrónico cool, ecléctico y derivativo donde la bossanova, el sonido disco y sobre todo el funk buscan el hit inmediato que nunca llega. Pese a contar con colaboradores de la talla de Ryuichi Sakamoto, Atom TM, Luorno y hasta Kylie Minogue la escucha del disco es poco más que un entretenimiento sonoro veraniego, para poner de fondo durante el aperitivo o a lo largo de esas horas muertas bajo el sol. El que fuera componente del trío neoyorquino Dee-Lite, a principios de los noventa, llega a incluir una versión del “My Sharona” de The Knack por parte de los Buffalo Daughter y Tycoon Tosh. Pero al final lo más acertado es la participación de Arto Lindsay en un tema atrayente de bossanova actualizada donde su voz se encadena a los coros femeninos, a su guitarra acústica y a los ritmos cortados de un Towa Tei que lo engalana todo.
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