Siempre se ha dicho que para ser un buen grupo garajero, uno de los mandamientos que se debían respetar era el de grabar en mono. Desconozco si esta banda norteamericana lo habrá hecho, desde luego lo parece. Da la sensación de que han grabado “Death By Unga Bunga!” dentro de una lata de guisantes. O también es probable que el tormentoso y salvaje ruido que sale de sus instrumentos sea fruto de que los másters casi desaparecieran en el año 98 a causa del huracán El Niño.
Pero se recuperaron, y ahora llegan, eso sí, más cadáver que nunca. Es en ese sonido aterrador donde radica el encanto del garaje más guarro. Guitarras bestiales, canciones sin cerrar y ruido por doquier. Este disco es un compendio de todas la virtudes que sólo acreditan mitos como The Sonics o The Standells. El fuzz, marca de la casa, se magnifica en “In And Out” o “I’m Bigger Than You”. Por supuesto, no falta el acelerado Farfisa en cortes pasados de revoluciones: “Just One More Dance” es buena prueba de ello. Así que ya lo sabes: si has llegado al final de la grabación es probable que estés más muerto que las Momias.
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