El productor Alexkid -un nombre, suponemos, robado del mítico personaje del juego de la Sega- regresa, con su tercer disco en la casa del señor Laurent Garnier, a su costumbre de titular sus discos en español (“Bienvenida” fue el primero) y recopila, en una obra de diversa inspiración y resultado, el trabajo de tres años de estudio en los que también le ha dado tiempo para remezclar a artistas tan dispares como King Britt o George Michael.
Y en este “Caracol” que le ha salido se advierten influencias del Detroit techno, el minimal (ay) y el electro en un ejercicio lo suficientemente rítmico para ser bailado y lo suficientemente sensual para ser escuchado en cada. Aunque el chico no es un dechado de originalidad, el disco es resultón y tiene un cierto aire etéreo en la producción que lo lleva más allá de lo correcto. Incluye también puntuales colaboraciones vocales, entre ellas la de una ex Nouvelle Vague, en el tema que cierra el disco, el vulgar “Back And Forth” o la de una tal Lissette Alea en el que ha sido primer single, “Nightshade”, un ejercicio de electro-soul tolerable. Sin embargo, como hallazgo y punto de amarre del disco, nos quedamos con la estupenda “Decibelly”, un hipnótico tema de aires trance que se rompe por la mitad para dar paso a un epílogo electro de traca.
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