Reconozco que apenas he vuelto a cruzarme con David Grubbs en el camino desde los lejanos tiempos de Gastr del Sol, tan sólo “Guess At The Riddle” su aportación al catálogo del sello británico Fat Cat, un disco que debe ser lo más cercano al pop que se ha situado el de Louisville en toda su carrera.
A la hora de consultar su biografía entremedias encuentro más de una decena de discos e infinidad de colaboraciones que lo retratan como ese iconoclasta sonoro que ha sido desde los tiempo de Bastro y Squirrel Bait. Sin embargo, parece que el tiempo no haya pasado por este “An Optimist Notes The Dusk”, un disco que retoma el legado de los citados Gastr del Sol enfrentando la poética dicción de Grubbs con su habitual y laborioso trabajo a las seis cuerdas, combinando arpegios limpios, desprovistos de toda distorsión y de estructuras cercanas al jazz, con la creación de ambientes enrarecidos en segundo término. En los extremos, un tema de rock hiriente y desnudo de título descriptivo (“Holy Fool Music”) y una larga pieza de aislacionismo que sirve para ponerle punto final a un disco que se debate en el misterio.
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