Aunque los –recuerden que hay un chico- leoneses Deviot todavía están más verdes que maduros y se desenvuelven mejor en formato proto-punk de acorde escaso y ritmo a piñón fijo, flaco favor les hicieron desde el control, privándoles de las dos terceras partes del volumen que luego disfrutamos. Buenas maneras y candidez (esas palmas en «Wait Here») a partes iguales. Lo contrario de Mercromina, que volvieron a impartir magisterio a base de repasar sólo algunas de sus mejores canciones, a través de un discurso sólido y hermanado con el ruido. Para que se hagan una idea, desarrollaron epígrafes como «Llamas», «En Un Mundo Tan Pequeño», «Temblando» o «Evolution». Mucho, oigan. Luego Los Fresones Rebeldes nos presentaron a Felipe como nuevo frontman y guitar-hero, amén de algunas de las nuevas canciones que aparecerán en «Exitos 99». La cosa sigue igual: les amas o les odias aunque es justo reconocer que hubo momentos realmente divertidos: «La Inocente» y «Al Amanecer», por ejemplo. Bien por ellos y por Undershakers que cada vez se muestran más solventes, empáticas y energéticas sobre las tablas. Como el reloj acechaba, las asturianas sólo tuvieron tiempo de despachar un repertorio sin resquicio con llamadas al pasado («Sola», «Vudú», «Mírate», «Después», «Send Me A Postcard», «A Tu Vera», «She’s Falling In Love With A Monster Man»...) y al presente («Radar De Amor», «Take Me», «Amor Perfecto», «Dime Sí»...) que es también parte del futuro del pop nacional. ¿Alguien da más por sólo cien duritos? Lo dudo.
That hits the target pefycetlr. Thanks!