Mundo Grotesco

No sé en cuántas ocasiones hemos escrito sobre Junji Ito, e imagino que volveremos a hacerlo muchas más. Ahora la excusa es la publicación de “Mundo grotesco”. Es posible que no me quede demasiado por añadir con respecto a su particular universo, a su increíble dibujo y a su capacidad para aterrorizarnos obra tras obra, utilizando una y otra vez los mismos elementos en su fórmula, pero consiguiendo siempre sorprendernos. Esa es una virtud en manos de pocos, y el mangaka japonés es uno de ellos.

Pero en este texto no voy a intentar convencer a profanos una vez más de su valía y de los recomendables que son casi todos sus títulos, más bien voy a escribir para quienes le admiran ya desde hace años. El motivo es sencillo. “Mundo grotesco” no es un cómic como tal, sino que se trata de un libro de artwork perfectamente editado y con el tamaño ideal para que podamos disfrutar de todas y cada una de las ilustraciones que incluye. Y “Mundo grotesco” recoge un total de ciento trece en color y blanco y negro, que resumen el universo malsano, oscuro y terrorífico del autor, prestando atención a sus obras y relatos más importantes. De este modo, son muchas las páginas dedicadas a “Tomie” o “Uzumaki”, por poner dos ejemplos, aunque también nos encontraremos otras con relatos breves como protagonistas.

Algunas ilustraciones proceden de viñetas, pero la mayor parte son cubiertas y contracubiertas, facturadas con técnicas diversas, desde acuarelas a óleos, pasando por dibujos a tinta o acrílicos, lo que nos ofrece una riquísima perspectiva general de lo que Ito es capaz de hacer con sus manos y sus herramientas. Un volumen ideal para Itoheads con ganas de completar la biblioteca con un libro en un formato y unas amplias dimensiones a las que no estamos acostumbrados los lectores de manga. Para redondear el tomo nos encontraremos con una entrevista con Ito, así como con un epílogo y una lista completa de las ilustraciones comentadas también por el propio artista.