Una Barcelona (algo) distópica y (muy) enrarecida tras la pandemia es el escenario que proponen, de manera conjunta, Laura Pérez Vernetti y Javier Pérez Andújar en la presente referencia. Un marco determinante en este volumen que apuesta por riguroso blanco y negro, como medio para potenciar la austeridad y el misterio inherente a la propia historia. Un hilo argumental que entrevera realismo áspero con una libre interpretación de ese entorno que acoge los hechos (con flashbacks y realidad virtual incluidas enredando aún más el asunto), en una mixtura que oferta a los autores múltiples opciones con las que desviar la narrativa de cualquier lógica. “El designo” no es sino un tomo en torno a la búsqueda (y posterior aceptación) de, precisamente, un destino inesquivable entre la vida y la muerte.
Por parte de sus protagonistas –desde la ya difunta Maravillas a El Largo Reina, pasando por el Padre Elías– y también de otros secundarios imprescindibles, como el chino gestor de la Funeraria Final Feliz o esa extraña pareja de flamencos que forman madre e hijo. El resultado es una desconcertante historia gráfica, suerte de entremezclar en la misma marmita “Desafío total” (Paul Verhoeven, 90), David Lynch, “El Exorcista” (William Friedkin, 73) y referencias a la cultura popular y personajes de la televisión basura. Todo auspiciado con el trazo de M.C. Escher y la apariencia ochentera de Ceesepe como posibles influencias bien asimiladas. Tanto que ambos referentes mutan lo suficiente como para, bien moldeados en beneficio propio, terminar convertido en distintivo de la pareja de firmantes, así como uno de los activos de este cómic inquietante, extraño y algo anárquico.
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