A lo Cubano (1999)
Esa fue la que lo cambió todo, hermano. “A lo Cubano” fue el comienzo de la historia, la canción que nos presentó al mundo. Era como decir: “Aquí estamos los cubanos, con tumbao, con sabor, pero con flow”. Esa mezcla de rumba, rap y raíz fue el pasaporte que nos abrió las puertas. Con ella nació un sonido nuevo, una forma distinta de hablarle al mundo desde nuestra isla. Fue el punto cero, el ADN de Orishas.
537 C.U.B.A. (1999)
El 537 no es solo un número, es el código del alma habanera. Esa canción es pura nostalgia, es estar lejos y sentir que La Habana te llama por teléfono. Cada vez que suena, uno vuelve a oler el malecón, el café, la lluvia cayendo en los portales. Es la canción de los que extrañan, de los que no se olvidan de dónde vienen. Por eso la gente la canta con el pecho, no con la boca. Es nuestra carta de amor a Cuba.
El Kilo (2005)
Con “El Kilo” ya estábamos más curtíos, más vividos. Ahí dijimos: “Vamos a hablar claro, sin maquillaje”. Es una canción que retrata al cubano de a pie, el que resuelve, el que inventa, el que ríe para no llorar. Es ritmo, mensaje y verdad. Esa mezcla que siempre ha sido Orishas: poesía del barrio con corazón de tambor. “El Kilo” fue cuando entendimos que también podíamos contar la historia social sin perder el sabor.
Nací Orishas (2005)
Esta es especial, porque ahí nos miramos pa’ dentro. “Nací Orishas” habla de lo que somos de verdad: hijos de África, nietos del tambor, creyentes de la vida y del espíritu. En esa canción está la raíz, el porqué del nombre, el alma que conecta a los cubanos con algo más grande que ellos mismos. Es una canción que no se canta, se siente. Cuando suena, los ancestros se mueven.
Cuba, Isla Bella (2022)
Esa canción fue como volver a casa después de muchos años. Fue el abrazo de los dos, el reencuentro con la esencia. “Cuba, Isla Bella” es un homenaje, una declaración de amor y también un deseo de futuro. Ahí dijimos lo que todo cubano siente: que aunque la vida te lleve lejos, Cuba siempre te acompaña. Esa canción sanó heridas y abrió caminos. Por eso es tan importante para nosotros.

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