La banda de heavy bluegrass actuará este mes de septiembre en Fillore Huertano (Elda), Sopela Kosta Fest (Sopela) y Garagardo (Etxebarri).
The Offspring - "Conspiracy of One" (2000)
Un amigo me dejó un cassette de este álbum, lo puse en el coche de mi madre y se quedó atascado, así que se puede decir que es el álbum que más veces he escuchado voluntaria o involuntariamente. En su defensa he de decir que me encantaban esos ritmos rápidos, ese toque rebelde y la inconfundible voz de Dexter Holland. En sus siguientes discos tengo la sensación de que hacían parte de las canciones en serio y otras de coña y las de coña no me gustaban nada. En 2008 los vi por primera vez en directo y me decepcionaron bastante, pero como me sabía casi todas las canciones me lo pasé pipa. Luego me decanté más por Bad Religion, Rise Against o Propagandhi. (En el coche de mi madre primero estuvo atascado el Backstreet’s Back de los Backstreet Boys y también es de mis discos favoritos. Tanto que hicimos una versión de I Want It That Way en el último disco de Moonshine Wagon).
Scorpions + Orquesta Filarmónica de Berlín: "Moment of Glory" (2000)
Mi padre también era músico y un día apareció con un reproductor de mp3 gigante, de los primeros que se habían lanzado al mercado, y un compañero suyo se lo llenó de música y nos pasamos horas escuchando música juntos. Este álbum nos encantaba a los dos. Creo que era por la combinación entre la música que realmente me gustaba con el instrumento que estaba aprendiendo a tocar: el violín. Estuve desencantado con el violín una temporada larga y estos discos impedían que lo dejara. Más tarde me pasó lo mismo con el S&M de Metallica.
Mägo de Oz - "Gaia" (2003)
Los descubrí cuando sacaron este disco. Mi tío me mandó discos de Iron Maiden, Metallica, Blind Guardian y cosas más duras como Shadows Fall que me encantaron. Me convertí en un preadolescente heavy que tocaba el violín y descubrir en Mägo de Oz la combinación del folk con guitarras con distorsión y dobles bombos me llamó mucho la atención. Me sacaba sus melodías de oído y me acercaron bastante a la música celta al igual que Celtas Cortos en la misma época.
"Fade to Bluegrass" (Iron Horse/Pickin on Series) (2003)
Creo que este es el disco que me dio y me quitó la vida. Un día escuché una versión de Nothing Else Matters de Metallica en bluegrass, que es el folk americano de raíces que se toca principalmente con instrumentos de cuerda y voces haciendo armonías (lo que hacemos ahora con Moonshine, vaya), y dije “¿qué demonios es esto?”. ¡Me flipaba, incluso más que Metallica! Estuve indagando sobre grupos del estilo haciendo principalmente versiones de mis canciones favoritas de metal, rock y punk-rock y descubrí a Hayseed Dixie, Iron Horse, Pickin on Series y era increíble. Banjos y violines a toda leche y las voces impecables. Le comenté a mi profesora de violín que me encantaba ese rollo y me dijo que ella no sabía tocar este estilo.
Slipknot - "Vol 3: (The Subliminal Verses)" (2004)
Este disco ya me voló la cabeza. Aquí ya dejé de tocar el violín, me dejé la melena hasta el culo y empecé a tocar la batería. Joey Jordison era un espectáculo a las baquetas, la voz de Corey Taylor me encantaba y escucharlos era una mezcla entre motivación, rabia y desahogo que no sabría explicar bien. Recuerdo que de pequeño me pasaba horas viendo programas de videoclips como MTV Rocks, VH1, VIVA, Los40, etc. y que iba apuntando los nombres de los videoclips que me gustaban para bajármelos del emule. Qué nostalgia a cuando se les prestaba atención a las cosas…
Ill Niño - One Nation Underground (2005)
Tras años escuchando bandas de nu metal, una que me sorprendió fue Ill Niño. Ese mestizaje entre metal con riffs y ritmos pesados con guturales y ese toque latin con voces y guitarras limpias que recuerda a Santana, Tito & Tarántula o incluso Maná era algo que no había escuchado nunca y este disco en concreto dio unas cuantas centenas de vueltas en el discman, en la minicadena, en el coche y en mi cabeza.
Transatlantic - "Bridge Across Forever" (2001)
Después de un tiempo tocando la batería me llamó mucho la atención el rock/metal progresivo. A día de hoy sigue siendo uno de mis estilos favoritos. Bandas como Yes, Rush, King Crimson, Porcupine Tree, Symphony X o Dream Theater me marcaron mucho. Dream Theater me encantaba, salvo la voz de James LaBrie, que no puedo con ella. Por eso me quedé con los discos de Liquid Tension Experiment y finalmente descubrí este discazo de Transatlantic, donde toca Mike Portnoy la batería (el mismo de Dream Theater). ¡Y vaya obra maestra! Me fascina cómo pueden componer un disco entorno a un late motiv principal y jugar con él durante tanto tiempo sin pecar de cansino con canciones de hasta media hora. Es un disco que trato con tanto cariño que me lo pongo solo en ocasiones especiales y prestándole atención para que no me sature de él. De vez en cuando una oncita de ese chocolate que tanto me gusta.
The .357 String Band - "Fire & Hail" (2008)
En 2013 formé Moonshine Wagon con otros 2 apasionados por el bluegrass y descubrimos un montón de bandas. Resulta que había una escena underground de este rollo que lo mezclaban con toques de punk, heavy o psychobilly y esta banda en concreto me flipó muchísimo. Iban a toda leche y con unas voces más macarras que en el bluegrass tradicional. Jayke Orvis, su mandolinista, es de mis mayores influencias y por él empecé a tocar la mandolina. La semana pasada toqué con él en el festival Muddy Roots de Tennessee y cuando me paro a pensarlo me resulta alucinante… ¡Qué vueltas da la vida!
Marcus King - "Carolina Confessions" (2018)
En 2018 descubrí a este tío y es que su voz y su guitarra… ¡DIOS! Lo tuve en bucle ni sé cuánto tiempo. Mezcla el country con un soul que te pone los pelos de punta varias veces por canción y eso es difícil hoy en día. Un chico joven, haciendo música con tanto gusto… Pues resulta que en 2019 estábamos de gira por Estados Unidos con Moonshine y teníamos un día libre en Nashville. Pues vaya regalo me dio la vida, que justo tocaba Marcus en un festival gratis en un parque. Este año le he vuelto a ver en el Rock Land de Santo Domingo de la Calzada y es que no para de crecer, mejorar y de sorprenderme.
Shawn James - "The Dark & The Light" (2019)
Su voz, su guitarra, su violinista, sus letras, su toque oscuro, su toque folk, su toque heavy y su toque soul: la combinación perfecta. No hay canción suya que no me guste. Es una pasada todo lo que hace y he tenido la suerte de compartir escenario con él y de haberle visto otras tantas veces y que cada una de las veces se me hayan desordenado los órganos, haya disfrutado como un niño y me haya hecho llorar. Me siento identificado con cada cosa que escribe, y si encima lo canta así… No hay escapatoria.
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