Control de calidad

Air France se separan después de darle mil vueltas a un disco que ya nunca llegará a ver la luz. Se disuelven porque “a pesar de que llegamos a producir siete discos desde que en 2008 publicamos el MiniLp ‘No Way Down’, un disco de UK Garage, otro de house y otro de r’n’b, no hemos conseguido que nada de lo que hemos grabado fuera suficientemente bueno. Lo intentamos con todas nuestras fuerzas”. Incluso durante el verano pasado llegaron a hacer público un tema “It Feels Good To be Around You” que se suponía que era el avance de ese esperado primer largo del dúo de Goteborg. Lo cierto es que siendo justos, aquella canción no tenía la magia de las que componía sus dos EPs. O tal vez sea que nosotros hemos cambiado, vete tú a saber.

“Lo intentamos con todas nuestras fuerzas”. Hay mucha tristeza en esas palabras, a pesar de que Air France no puedan más que mostrarse orgullosos de su tenacidad, pero sobre todo de la honradez para consigo mismos y para con su público. Porque a diferencia de tantos otros han sabido separarse lo suficiente de sus canciones como para reconocer su imperfección, posiblemente el ejercicio más difícil que existe para un creador. También para cualquier persona a la hora de juzgar nuestros actos…

Algo así me da vueltas a la cabeza desde hace unos días. Estoy leyendo un libro de entrevistas a un músico y la verdad es que me mata, me mata, me mata…