Bajo una estética definida por los colores rojo y negro, el videoclip hace un recorrido por diferentes formas y figuras psicodélicas de lo más abstractas, las cuales todas giran en torno a la figura de un robot con una estética digital noventera. Por su parte, el rostro del cantante Ambrose Kenny Smith aparece superpuesto en algunas de las partes robóticas como si de un ente se tratase.
"Nonagon Infinity" suena a futuro post-apocalíptico, a Horror Sci-fi, a art-rock... Unos conceptos y nos ambientes que, sin duda, han quedado palpables en el videoclip.
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