"Es posible que tengamos que sacrificar algunas cosas en el futuro si queremos mantener la marca"

Este fin de semana se celebra en Alburquerque (Badajoz) la vigésima edición de Contempopránea, cita obligada del indie patrio y uno de los festivales más veteranos del país. Aprovechamos para echar la vista atrás con su creador, Agustín Fuentes, un apasionado de la cultura pop que se atrevió en 1996 a traer a un pueblo de Extremadura la que entonces era una escena musical desconocida. Pronto Contempopránea se convirtió en el mejor escaparate para las bandas y los sellos de pop independiente nacionales. Después de dos décadas el festival afronta el futuro con muchos retos, el principal, mantener su esencia.

1.- ¿Cómo empezó todo? ¿cual fue el origen? ¿qué recuerdas de aquellas primeras ediciones? ¿qué obstáculos hubo que salvar en cuanto a presupuestos, infraestructuras, contratación…?

El festival como tal arrancó en 1.996 aunque ya habíamos organizado eventos en los años 80 y 90. Todo empezó de forma muy amateur y apasionada, sin apenas presupuesto. Unos comienzos muy punk "hazlo tú mismo" y con entrada gratuíta.
Con el paso de los años fuimos ganando la confianza de las instituciones y de los sponsors privados quienes ayudaron a mejorar las infraestructuras y contrataciones del festival.
Siempre hicimos un festival a la medida del presupuesto real con el que se contaba, si había dinero se gastaba en mejorarlo.

2.- Tras el boom de los festivales a finales del siglo pasado hubo una especie de burbuja que se llevó por delante muchos eventos de este tipo ¿cómo superó el festival esta primera crisis? ¿qué hizo que vuestra marca fuera sostenible en criterios económicos, organizativos…?

El apoyo de la Junta de Extremadura y de Cruzcampo siempre fue fundamental porque la recaudación de la venta de todas las entradas no alcanza el 50% del coste total del festival. Y porque en la organización nunca nos importó no hacer caja con el festival, de lo contrario la burbuja también se lo hubiera llevado por delante.

3.- La marca. Si algo caracteriza a Contempopránea es haber creado una marca por encima de un cartel determinado o un artista en concreto. ¿cómo se consigue esto? ¿qué línea de trabajo hay que seguir?

El prestigio de la marca ha sido una tarea muy personal y trabajada. He cuidado mucho la estética y el mensaje, sin caer en lo superfulo o banal. Pero porque en realidad siempre lo he sentido así. Es un proyecto con autenticidad porque así lo siento y es algo que siempre he sabido transmitir tanto a medios como a público, pero con mucho trabajo de campo.
Mi línea de trabajo ha sido la sinceridad y estar a gusto conmigo mismo

4.- ¿Qué destacarías a día de hoy de Contempopránea? ¿en qué momento se encuentra después de dos décadas en cartel?

Goza de una buena salud, hemos logrado crecer en Badajoz y hemos mantenido hasta ahora la edición clásica de Alburquerque. Después de 20 años creo que estamos en un momento de inflexión. La clave para sobrevivir está en saber adaptar el festival a estos nuevos tiempos.
Es posible que tengamos que sacrificar algunas cosas en el futuro si queremos mantener la marca.