¿Cómo os conocéis? ¿Cómo empezáis a colaborar juntos?
Ariadna: ¡Por Tinder! (carcajadas generales) Ahora en serio, fue en un concierto en el Círculo de Bellas Artes, allí vi a Edu. Yo ya estaba buscando un productor de electrónica o una colaboración, sabía que necesitaba a alguien de ese mundo y allí ya me encantó.
Habéis hecho un ejercicio conjunto de romper barreras entre estilos. ¿Cuál ha resultado placentera, de demoler? ¿Cuál ha sido la parte más dura de todo este proceso?
Edu: Algunas canciones han sido muy fáciles y otras han sido un suplicio de las vueltas que hemos tenido que darle. Lo más duro ha sido no tener referencias, no tener apenas en qué fijarte, quizás está “Omega” a lo mejor pero tampoco es el caso, de electrónica contemporánea con flamenco y jazz no hay mucha historia. Cosas como "¿Dónde meto las cosas?". Por ejemplo con los editores modernos, la gran mayoría de música electrónica está en 4/4. A la hora de llevarlo al directo si lo hacemos en 3/4 o un cambio de compás, algo tan fácil tocando, con un secuenciador es un Cristo. Son retos. Por ejemplo el tema que hacemos con Nach le hemos dado muchísimas vueltas, en cambio, el tema de Zara lo hemos visto claro desde un principio.
Ariadna: Yo he aprendido muchísimo, moverte en otros circuitos o no saber qué hacer es complicado, pero a la hora de componer ha sido muy gratificante. Yo venía de componer temas de cinco minutos solo a piano con muchísima información en cuanto a notas. Con la electrónica he aprendido a valorar otros tipos de información de sonidos, planos, silencios… Para mí componer así ha sido otra dimensión. He disfrutado mucho con todo el proceso, además no ha sido para nada lo que yo pensaba que iba a ser.
En todo el proceso de creación, ¿qué tema os ha divertido más?
Edu: El tema con Covey me encanta como ha quedado al final. Con Zara, bueno, es que merecería la pena hacer un tutorial de cómo comenzó el tema y cómo se ha ido transformando, cómo hemos tenido que deconstruir en algunos casos. Eso nos ha pasado mucho, algo que empezaba siendo melancólico terminaba siendo alegre y te llevaba a otro sitio. Creo que eso se pierde cuando hace los discos solo una persona. De hecho nosotros en lugar de como hace todo el mundo, que saca un disco y luego sacan los remixes, nosotros antes del disco, podríamos haber sacado los “premixes” (Risas )
Ariadna: Síiii, hay casi tres horas de cosas que nunca salieron.
En el álbum hay dos covers, ¿por qué Edith Piaf y Paco de Lucía?
Edu: Con Paco, la partitura es tal cual, es una revisión moderna.
Ariadna: Sí, es tal cual con piano en vez con guitarra, siempre me gusta meter algo de Paco en todos mis trabajos a modo de homenaje.
Edu: Es que claro, a ver quién tiene huevos a cambiarle una nota al maestro… (Risas).
Ariadna: Lo de Edith es porque es una canción que me ha gustado desde siempre y a poco estuvimos de dejarla fuera porque no me salía, pero al final sí que pudo ser, es un detalle que ha terminado formando parte del disco.
Ariadna: "Yo tenía prejuicios como todo el mundo, pero a día de hoy cualquier cosa que sea de calidad, la haría"
¿Pensáis en un futuro seguir experimentando con géneros tan diferentes a lo que venís haciendo? Ariadna, si después de esta experiencia te propusieran mezclar música clásica y por ejemplo heavy metal. ¿Aceptarías?
Ariadna: Yo tenía prejuicios como todo el mundo, pero a día de hoy cualquier cosa que sea de calidad, la haría.
Edu, a ti la pregunta a la inversa y terminamos antes. ¿Dirías que no a trabajar con un estilo de música en concreto?
Edu: Yo creo que no. Aunque me empieza chirriar un poco cuando veo demasiada intencionalidad económica en la peli, cuando solo se piensa en monetizar la música y en alcanzar tal lista de éxitos, me da grimilla. No me importa hacer cosas que al final tengan un carácter comercial, pero cada vez me alejo más de esos planteamientos.
Ariadna, ¿Crees que de la mano de Edu podrás hacer llegar tu música a un público más joven?
Ariadna: Estamos intentando hacer algo muy diferente. Hay un exceso de información que nos hace encasillar rápidamente la música y yo misma, que venía de hacer temas solo al piano. Al meterles letra, que es lo más inmediato que hay, veremos a quién le llega…
¿Es posible que la formación clásica se quede un poco fría y cuadriculada de cara a la creación?
Ariadna: Muchos profesores no saben tocar si no tienen un papel delante y eso es super triste. Yo estuve muy peleada con la música clásica y ahora soy capaz de coger piezas clásicas, improvisar y darme cuenta de que el misticismo de que la música clásica es intocable no es cierto.
Edu: Yo creo que la música académica cada vez se distancia más de la música popular y en concreto la música popular cada vez se hace más simple, nada tienen que ver los arreglos de Stevie Wonder con los de Rihanna.
Ariadna: Tampoco es así, yo tengo bastante más fe en el ser humano que Edu (risas).
¿Creéis que el público español está preparado para un disco así?
Edu: Lo raro es que no haya pasado algo así antes. En otras culturas toman sus elementos tradicionales de una forma natural y los adaptan. En cambio aquí salvo grupos como Triana, el "Omega" de Morente o Niño de Elche… no se ha dado.
Ariadna: También es cierto que el flamenco es una cultura muy hermética, incluso desde el punto de vista de enseñar.
Para terminar, llega el apocalipsis nuclear y solo podéis salvar un disco ¿Cuál sería?
Ariadna: Pues cualquiera del maestro, de Paco de Lucía. Uf, vaya pregunta es que hay tanta música….
Edu: pues…. pueeees yo ¡Mi disco duro! (Carcajadas) Bueno, pues si es el último creo que uno que no haya escuchado. (Risas de nuevo) Nos rendimos.
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