Grupo de discografía extensísima y de recorrido vital maratoniano, Tangerine Dream acaban de editar una completa caja recopilatoria consistente en ¡seis! Cedés que tratan de agrupar lo más destacado de ese itinerario. Se trata de un extenuante repaso a lo largo de dos décadas de intensa actividad marcadas, como no podía ser de otra manera al tratarse de un grupo de rock sinfónico, por el seguimiento incondicional de algunos y el desprecio casi fundamentalista de otros.
Dos de los Cd´s recogen íntegramente actuaciones en vivo del grupo alemán, mientras que los cuatro restantes se ocupan de los momentos más importantes de su discografía. Una salvajada inagotable que saciará los apetitos más hambrientos y que, sin duda alguna, no deja cabos sueltos. “I-Box: 1970-1990” supone, en resumen, una buena oportunidad para adentrarse en el plúmbeo universo de esta discutible y profundamente irregular banda (sus primeras grabaciones merecen, cuando menos, nuestra atención; sus últimas obras debemos olvidarlas cuanto antes) que, para bien o para mal, ya constituye uno de los iconos musicales de la década de los setenta.
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