No se le puede pedir más sobre el escenario. A esta conclusión solo se llega cuando un artista se implica al cien por cien en su espectáculo. Y lo de Xoel López en el Price fue un completo de lujo. Con Miguel Rivera y Charlie Bautista formando parte de la banda. El artista consiguió levantar al público y enchufarle su espíritu latino desde el comienzo del evento.
Bailecitos de todo tipo, desde los asturianos de Iván González “Chapo”; hasta los gallegos de la adolescencia de Xoel. Falsetes imposibles terminados en aplausos en “Vi a un hombre desaparecer”. Romanticismo argentino con Lola García Garrido. Peticiones del público que acabaron siendo realidad en forma de “Historia Universal”. Y hasta un agradecimiento a David Bowie por dejarnos tantas canciones bonitas. En conclusión, más de dos horas de concierto para que “Paramales” se luciera a lo grande. Donde los asistentes coreaban su nombre como si se tratara de un partido de fútbol y dejando la sensación de que acabas de ver a un colega de toda la vida. “¡Ole, ole y ole! Como decimos los gallegos”. Qué buen resumen Xoel.
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