Slayer + Megadeth, la canción sigue igual
Conciertos / Slayer

Slayer + Megadeth, la canción sigue igual

7 / 10
Daniel F. Marco — 29-03-2011
Empresa — Rock´N´Rock
Sala — La Riviera, Madrid
Fotografía — Juan Pérez Fajardo

Perdóneseme la impertinencia, pero ¿disfrutan Slayer de lo que hacen? De no ser así, no imagino peor tortura que militar en este grupo. Llevan tocando (casi exactamente) lo mismo desde principios de los ochenta, y ya sea en estudio o en directo han de mantener un nivel sobrehumano, tanto de intensidad y agresividad, como técnico. Cabe concluir, pues, que sí, que para soportar semejante presión, tiene que molarles ser Slayer. Desde luego, los que sí que disfrutan, como cerdos en el lodo, son sus fans. Y es que si te gusta la banda, es absolutamente imposible alegar pega alguna a un cuarteto que en directo roza la perfección. El pescuezo de res de Tom Araya sigue profiriendo el mismo bramido desgarrado de toda la vida, las guitarras sueltan chispas y el doble bombo vibra como una taladro percutor. El mismo festín de siempre, sí, pero tan suculento y pantagruélicco como de costumbre. Da vértigo pensar que llevan treinta años así, y acojona imaginarlos manteniendo el nivel otra década (de agresión) más.
Y hablando de soportar presión, quienes deben sentirla sobre sus hombros como el orbe de Atlas, son Megadeth. Abrir para Slayer cada noche no debe ser moco de pavo. Mucho más irregulares y dispersos (lo que para mí es un plus, que les dota de impredecibilidad), la banda de Dave Mustaine, dadas las circunstancias, apostó a caballo ganador, limitándose a desgranar un completísimo Grandes Éxitos, interpretado con mayor diligencia que de costumbre. No cortaron orejas, pero tampoco defraudaron a nadie.
 Quienes debían estar en la gloria, eran Angelus Apátrida, el mejor grupo de thrash metal que jamás ha dado España. Supongo que para ellos, tocar junto a estos dos clásicos del thrash sería un sueño hecho realidad. Más conscientes que nadie de la coyuntura, supieron estar a la altura de las circunstancias, y si no fuese por los comentarios que de vez en cuando soltaron por el micro, un espectador despistado los tomaría sin dudarlo por guiris.

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.