I Know I´m a Singer Songwriter... Festival (2º dia)
Conciertos / Christina Rosenvinge

I Know I´m a Singer Songwriter... Festival (2º dia)

8 / 10
Cristina V. Miranda — 15-10-2009
Empresa — I Am An Artist
Sala — Teatro Eslava, Madrid
Fotografía — Alfredo Arias

Si el día anterior había sido el turno de ellos, ayer les tocó a ellas defender la etiqueta de songwriter ante un público ligeramente más numeroso. Vestidas de riguroso blanco, desbordando timidez y sin más necesidad que la de sus guitarras fueron las estadounidenses Simone White y Victoria Williams las encargadas de comenzar la noche tras la introducción de “Spoon River”. La primera optó por una mayor comunicación con el público, con prólogos en castellano y la elección de algunas de sus canciones más conocidas como “The Beep Beep song” o “Victoria Anne”; mientras que Williams, a pesar de su dilatada experiencia en los escenarios, no llegó a mostrarse del todo cómoda durante ningún momento de su brevísimo concierto, en el que a pesar de alguna excepción como “Crazy Mary” optó por un repertorio poco asequible para una audiencia ya escasamente predispuesta. Al igual que había pasado la noche anterior, la sala no comenzó a mostrar mayor respeto hasta la entrada de la representación patria de la noche. Christina Rosenvinge surgió, en claro contraste con las musas americanas, vestida de perfecto negro y su habitual carisma escénico. Acompañada de guitarra, chelo y percusión, ofreció un concierto basado fundamentalmente en su último (y aplaudido) trabajo “Tu labio superior”, comenzando con “Nadie como tú”, finalizando con “Anoche-El puñal y la Memoria” y cediendo espacio a algún rescate menos aplaudido pero interesante como “Liar to Love”. Pero aunque ayer era la noche de ellas, fue el único chico de la cita quien de verdad acaparó todas las atenciones. Josh Rouse llenó el escenario asistiéndose de guitarra, contrabajo y el piano de Raul Fernández. Consciente de la atención que logró recibir de un público bastante rebelde hasta ese momento, supo inteligentemente como mantenerla con un concierto divertido y emotivo a partes iguales. Intercalando canciones de su último disco (que promete mantener el nivel a pesar del riesgo de algunos temas en castellano como “Valencia”) con clásicos como “Sweetie, Winter in The Hamptons” o “Quiet Town”. Rouse fue el triunfador absoluto de una noche creada precisamente para el disfrute de propuestas como la suya. Y también el único que se permitió un bis, solicitado y necesario, que bordó gracias a la coreada “Love Vibration”.

2 comentarios
  1. des-almado 27 marzo, 2015

    Yo no sé lo que ocurre últimamente en Madrid pero la gente es de lo más irrespetuosa, nunca he entendido a esas personas que van a un concierto y se ponen a hablar (no sería más fácil quedarse en la puerta?) Otra cosa, que C.Rosenvinge esté por delante de Vic Williams no hay quien lo entienda...

  2. para mi hubo dos triunfadores, evidentemente cada uno en su estilo, Rouse y Rosenvinge que nos dejó muy buen sabor de boca.
    En cuanto a des-almado, gente irrespetuosa por hablar en los conciertos? es un concierto no una misa..

Lo siento, debes estar para publicar un comentario.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.