Kiki D´Aki exhibió como de costumbre su buen gusto y su ausencia absoluta de artificio y pretensiones. Pop elegante y minimalista a medio camino entre Natalie Merchant y Vainica Doble. Desgranó su último disco “Villa Flir” y se fue sin hacer ruido. La ocasión llevó a más de uno a pensar que quizá habría alguna concesión al repertorio de Las Chinas, cosa que no ocurrió. En cuanto a la Rosenvinge lo cierto es que estuvo realmente bien, metida en su nuevo papel (ya no tanto) de Nico madrileña derrochando soltura y convicción. Sólo un par de apuntes: no se qué pintaba en este marco un concierto cantado íntegramente en inglés (salvedad hecha de un par de guiños a Ella y los Neumáticos), algo que en La Movida era considerado propio de paletos y acomplejados. Por otro lado no estaría de más que la chica se tomase a sí misma con un poco más de humor; ya sabemos todos que se desayuna día si día no con Kim Gordon pero no hace tanto estaba haciendo “chas y apareciendo a tu lado”. Por lo demás, te queremos igual, Cristina.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.