Tener una discográfica en 2017 (II)
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Tener una discográfica en 2017 (II)

Manuel Jubera — 14-02-2017
Fotografía — Mariano Regidor

¿Os veis condicionados en vuestro trabajo por factores externos?
(Mark) Mi mayor problema es Manuel. Viene, fuma y nos lleva a tomar el vermut a la una (risas). Bromas al margen, mi mayor problema es que España no se gasta dinero en música. Comparado con gente de otros países con los que hablo las tasas de conversión de Spotify son una mierda, quiero decir que casi nadie paga.
(Manuel) Ha habido una década “perdida” en la que desperdiciamos la oportunidad de que la gente entendiera que la música no es gratis. Es decir, que un montón de gente trabaja en la industria del disco y no sirve la ridícula excusa de que “Yo me lo bajo o pirateo porque el artista come de lo que gana en directo, así que pago la entrada pero no el disco”.
(Mark) Se ha llevado el filisteismo a una cuestión de orgullo nacional. Esto puedes ver en los foros de los periódicos pero también en el propio Gobierno. Lo de subir el IVA Cultural no ha sido casualidad, lo de quitar la copia privada no ha sido casualidad. Ha habido una intencionalidad de putear a los culturetas.
(Manuel) Eso es evidente. El IVA de la música grabada siempre ha sido el IVA general. Pero que hayan subido el IVA del teatro, de los conciertos, de los festivales, etc. es realmente bochornoso. Quitan la copia privada porque hay una corriente subvencionada por las grandes compañías que venden aparatos. Se elimina el canon privado de los discos duros, los iPhones, etc., y lo meten a Presupuestos Generales del Estado, asignándole la vigésima parte de lo que se estaba generando.
(Mark) Pero es que nosotros, la gente, hemos creado un ambiente en el que el Partido Popular se siente con fuerza para hacer esto, gracias a que hay quien dice “Yo no pago por los discos porque los de las discográficas son unos hijas de puta y los artistas unos putos vagos”. Me gustaría ver como la peña que dice eso se hace una gira de treinta conciertos por España para asegurar que los artistas son unos vagos...
(Manuel) Sí. Los mismos que se escandalizan del término “populista” son los que quitar el canon de copia privada, y no hay decisión más populista que esa. La copia privada es un derecho se vincula a la popularización del cassette y que te permite hacer una copia privada de la música que ya has comprado. Cuando comprabas un disco podías grabarlo para uso tuyo, es decir, te compras un vinilo y te lo grababas en cassette para llevarlo en el coche. Es algo obvio, disfrutar de tu música. Así que la copia privada, simplemente, es pagar un pequeño derecho para poder duplicar algo que tú ya has pagado. El levantamiento se trata de una medida populista tomada por la presión de las asociaciones de internet, mientras que la Directiva Europea dice todo lo contario. De hecho el Gobierno tiene que rectificar ahora su decisión...
(Mark) Pero la cuestión simbólica de que se hiciera esto para beneficiar a los fabricantes tiene mucho peso. A eso me refiero cuando hablo de “filisteismo”. Es que estar orgulloso de dificultar y matar la cultura de tu país… pues me da pena. Con todo lo que España ha dado al mundo, e es una putada que se hable de la cultura española en esos términos.

“Durate una década desperdiciamos la oportunidad de que la gente entendiera que la música no es gratis”

Me gustaría que me hablaseis del debate editorial y de su relación con los medios, en concreto, con la televisión. ¿Cómo os afecta?
(Mark) Es una putada, una mierda. Que se permita que exista algo así creo que responde al mismo juego del que hablábamos. Que las TV hagan eso…
(Manuel) Básicamente, las TV privadas programan música a altas horas de la madrugada para que el porcentaje que tienen que pagar por derechos de autor y derechos de ejecutantes, les retorne de vuelta. Es un subterfugio legal que se buscan las TV.
Otra cuestión son las televisiones públicas, que deberían defender la diversidad cultural y no hacer esta misma operación. Quiero decir, que La 1, La 2 o las TV autonómicas programen música para obtener un retorno de lo que tienen que pagar... Además, lo que sucede con eso es la exclusión del uso de la música y el estancamiento de programas musicales, ya sean de novedades, o de videoclips… Que haya un programa de treinta minutos con novedades o actuaciones, no debería ser tan difícil. Al final, lo que sucede es que intentan programar la menor música posible para que en la franja nocturna ellos tengan el mayor retorno. Es una cuestión meramente económica, y que las televisiones públicas entren a eso en vez de salvaguardar la diversidad cultural es deplorable

Vosotros, que trabajáis además de como sello como distribuidora, ¿sufrís el problema de que determinadas tiendas no quieran trabajar con vosotros? ¿Cuáles son las dificultades de hacer que los discos sean accesibles a la gente?
(Mark) No, no hay tiendas que no trabajen con nosotros.
(Manuel) Hay tiendas con las que no te interesa trabajar por una cuestión de catálogo. En el caso de Mark, que lleva Adele, no lo vas a encontrar en un hipermercado, no vas a ver Radiohead en el Carrefour, por ejemplo. Es una cuestión de no perder el tiempo. El público va a determinadas tiendas a comprar determinados discos.
(Mark) Si quieres el disco de Radiohead sabes que en la Fnac o en El Corte Inglés lo vas a tener, y si quieres el de Nick Lowe sabes que tienes que ir a Radio City…
(Manuel) Lo que está claro es que un tío que quiere un disco de Alejandro Sanz no va a ir a Bajo El Volcán a comprarlo.

Hablando con Albert y con Luis comentábamos que la música está por todas partes: el gimnasio, las tiendas, la oficina,.... ¿Cómo hacer de esa omnipresencia un valor real?
(Mark) Más bien nunca dejas de oír música, pero no la escuchas. Como cuando vas en un ascensor...
(Manuel) Creo que la música se utiliza constantemente porque el silencio es incómodo. Imagínate un centro comercial sin música: sería incomodo oír los gritos de los niños correteando. La música hace que el ambiente sea más agradable.
A tu pregunta te diría que se trata de una cuestión de educación. Que no se ha defendido la música en este país y que los responsables del Ministerio de Educación no son conscientes de que los niños que van al colegio deben entender que la música, el cine y la literatura tienen un valor y unos derechos inherentes. Que hay que respetarlos y que deben tener una retribución.
(Mark) Sobre lo del contexto a mí me ha pasado que he entrado en El Corte Inglés y que estuviese sonando Container Drivers, de The Fall y, joder, ahí sí que me paré y me quedé a escucharlo, porque pensé: “¿Quién está programando la música aquí hoy?”. Estaba encantado. También hay música que está hecha para que no te distraiga demasiado de lo que estás haciendo.
(Manuel) Música de ascensor.
(Mark) Eno en los setenta decía que hacía música con ese propósito, y que luego haría música para otros momentos en los que hubiese que prestar atención. Me gustaría que los servicios de streaming dieran más contexto a la música, que hubiera una manera audiovisual de ver el arte que acompaña al disco, que no la estuvieras viendo siempre en un teléfono... ¿Cómo creamos eso? Educando a la gente para que escuche bien y preste atención. E insistiendo para que pongan The Fall en El Corte Inglés. El mundo será mucho mejor si pasa esto.

(En este momento Mariano Regidor, autor de las fotografías que acompañan a esta entrevista, interviene)
(Mariano) A mí me fascina que nos centremos en nuestra generación, la llamada Generación X y los “baby boomers”. Pero son los “millennials” son los que vienen a ocupar ese espacio como consumidores de música, y ellos parten de un modelo muy distinto al nuestro… Si mi generación, la de quienes ahora tenemos treinta y pico, ya éramos reticentes a comprar los jóvenes creo que ni se lo plantean. No entra en su cabeza.
(Manuel) Es la eterna historia: “Yo escucho Los 40, es gratis”. No, no es gratis. Vamos a ver, estás oyendo publicidad. La gente tiene Spotify gratis y, aparte de que la calidad de sonido es bochornosa, suena fatal, de repente escuchas un anuncio.
(Mariano) Lo que quiero decir es, ¿cómo os dirigís como sello a esta gente que ha cambiado sus valores?
(Manuel) Es que no es una cuestión de vender discos a gente de 18 años. Existe la idea de que Spotify ayuda mucho a acabar con la piratería porque la gente se plantea que para qué va a tener discos y discos duros llenos de mp3.

(Mariano) Es que creo que esas nuevas generaciones no piensan ya en descargarse nada.
(Manuel) Yo tuve ayer una conversación con el dueño de un club que programa actuaciones en directo. Y me decía que la gente más joven, los “millennials” o los “post-millennials” ya, no encuentran placer en ir a un sitio y tomarse una buena copa. Y yo le respondía que cuando nosotros éramos jóvenes, el dinero que teníamos lo empleábamos en música, algo de ropa y beber.
(Mark) Y en esnifar pegamento (risas)
(Manuel) Esnifar pegamento o lo que sea. Hace años era impensable comprarte un billete de avión, directamente no podías acceder a ello. Ahora simplemente hay un abanico mucho más amplio de ofertas y la gente de veinte años se coge un vuelo a Ibiza por el mismo precio que se toma dos gin tonics.
(Mark) Tengo una anécdota para esto. Mi sobrino y mi hijo tienen la misma edad, diecisiete años. Los dos tocan la batería. Mi sobrino se vino a pasar las navidades con su padre, mi hermano, que me dijo que le comprase unos discos de vinilo de grandes baterías. Le compré uno de Fela Kuti con Ginger Baker. Y cuando mi hijo los vio me preguntó para quién eran. “Pues para tu primo William”, le digo yo. Estaba muy sorprendido de que su primo inglés quisiera discos. Me sorprendí preguntándome si mi hijo en un año pensaría que tal vez no está tan mal escuchar discos. A mí me ve todas las noches haciéndolo. Y yo no solía tener muchos discos cuando era adolescente.

“Hoy hay un abanico mucho más amplio de ofertas y la gente de veinte años se coge un vuelo a Ibiza por el mismo precio que se toma dos gin tonics”

¿Os acordáis del tanga de PXXR GVNG?
(Mark) El Guincho también sacó una pulsera que venía a sustituir al CD o el vinilo como objeto… Pero eso son experimentos, como el boom de Myspace. Se publicitó como una revolución en la música y realmente, salvo por los Arctic Monkeys, apenas sirvió para descubrir grandes grupos.
Respecto al consumo, ahora un chaval de dieciséis años sabe que necesita todos los meses veinte euros para pagarse el iPhone y ahorrar otros quince para
cambiarlo por el nuevo modelo llegado el momento. Y si son consumidores de música... joder, los festivales son baratos pero el tren, la bebida…

Eso no deja de ser llamativo: que mientras las ventas de discos se han hundido a los festivales parece que cada vez acude mas público.
(Mark) Tiene que ver con la experiencia comunal de estar allí con los colegas, y eso más tarde se reproduce en una casa escuchando el disco también con sus amigos. Lo que pasa que en España hay menos costumbre de ir a casa de colegas a escuchar música; la gente suele quedar para verse fuera, en bares. En Inglaterra solíamos ir a casas y el LP te servía para liarte el porro, escuchar el disco y hablar de él.
(Manuel) Hace veinte años los niños estaban jugando al futbol en la calle. Ahora tú vas a un parque y hay seis padres con los siete niños que quieren jugar. Son modelos que han ido cambiando.
(Mark) Se ha instalado mucho miedo.
(Manuel) Cierto, pero los chavales que van a un festival y entran en contacto con la experiencia de la música en directo… La música es un acto efímero, es algo que o estabas ahí o te lo pierdes. Pero en tu día a día recuperas esa experiencia a través de la música grabada. Las dos cosas van de la mano. El mejor marketing para que un grupo tenga repercusión y crezca es todo lo que se hace a partir del disco. Y viceversa: para que un artista alcance cierto estatus y que sus grabaciones se hagan populares debe actuar en directo. Es como el cine y el teatro mezclados. Como una película que los actores representan a través de una obra de teatro. Al final es marketing.
(Mark) Quién sabe. A lo mejor llega el momento en que la gente decida que no quiere que las compañías de internet y el Gobierno tengan sus datos, y piense: “Me voy a ir a una tienda de discos a comprarme lo que me dé la gana, y así nadie hace un estudio tan especifico del consumo”. Si tienes veinte años, ideas cercanas al anarquismo y las quieres aplicar al terreno del consumo no es descabellado que puedas llegar a eso ¿no?
(Manuel) El sistema actual es muy intrusivo. Hace un año o año y medio, tenía el Spotify enchufado a mi equipo de música y, no sé a cuento de qué, empezamos a descojonarnos de Bertín Osborne y pusimos una canción. Bien, pues el viernes pasado Spotify me sugirió que escuchara el nuevo disco de Bertín. Vete a tomar por culo, tío. No sé, yo soy muy celoso de mi privacidad.

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