Tres discos ha tardado la cantante de Ohio en sacar la grunge que llevaba dentro agazapada esperando su momento. Por lo visto se ha tenido que casar con el bajista y co-productor del álbum Jesse Newport para embarcarse en una fiesta constante, y dejarse llevar por el sonido guitarrero y crujiente que su anterior productor Dan Auerbach (The Black Keys) no llegó ni a intuir que poseía. Sin embargo, el cambio se ha quedado a medio camino porque no alcanza ni de lejos las cotas de fiereza que sí ofrecían bandas como Babes In Toyland o L7, aunque eso no le resta mérito del todo, y el aficionado pueda disfrutar de canciones con cierta enjundia como “Do I Have The Time” o “Anything You Want” que te remiten directamente al sonido más domesticado de Hole. Podemos decir, por tanto, que se agradece que mueva ficha y endurezca su sonido, pero puestos a soltarse el pelo que lo haga del todo y no se quede en cierta medianía.
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.